En el artículo de ONU Mujeres difundido por Montero y otros miembros de Podemos, se explica que la cultura de la violación es “omnipresente”, puesto que está “grabada” en la forma de pensar de la sociedad y “siempre está arraigada en un conjunto de creencias, poder y control patriarcales”. Concibe la violación como un problema social y cultural que de cierta forma es aceptado y normalizado debido a prejuicios sobre el género, el sexo y la sexualidad Artículo de Rocio Gil Grance, periodista y feminista