Hace 2 años | Por pert0 a eldiario.es
Publicado hace 2 años por pert0 a eldiario.es

La autora catalana de origen marroquí criticó en redes sociales la inclusión de una mujer vestida con pañuelo musulmán en la cabeza, Fátima Hamed, en el acto Otras Políticas, abriendo una polémica que no ha dejado de crecer desde entonces. Muchas voces se alzaron para reivindicar la libertad que asiste a toda mujer para llevar hiyab, si así lo decide, o su importancia como signo de identidad "¡Pero es que lo que defienden es la libertad que tienes para someterte, para esclavizarte, y eso no existe! [...] Es algo que nos imponen"

torkato

#2 Todo eso fue impuesto en los 70, no hay mas que ver fotografías de antes y después.

Y ya no es solo eso, sino que hay gente que lo defiende como un símbolo de libertad, feminismo y empoderamiento.

cromax

#3 Incluso más tarde de los 70. En los 90, la primera vez que visité Marruecos, era una cosa restringida al ámbito rural. En las grandes ciudades como Casablanca o Rabat veías casi más mujeres sin pañuelo que con él.

casius_clavius

#2 Esos son los típicos más papistas que el Papa. Sin tener ni idea del contexto se ponen a defender una costumbre infame con argumentos que contradicen su ideario.

Shotokax

#2 se suele asociar "cultura" como algo bueno, pero hubo alguien que la definió como "las manías de cada país". Por ejemplo, el culto al cuerpo o el consumismo forman parte de nuestra cultura capitalista. Pero claro, son cosas nuestras y se suele ver mejor la paja en el ojo ajeno.

El velo está en la cultura de muchos sitios desde hace mucho tiempo; lo cual no quiere decir que sea bueno (su significado, de hecho, no siempre tiene las mismas connotaciones), pero sí es cierto que quizá no se mide esta costumbre con la misma vara de medir que otras. Ojalá analizáramos nuestra cultura con las mismas exigencias.

D

#2 Nos la suda qué lleven en la puta cabeza en otro país

D

#2 Conocí a un afgano hace años que me dijo que por culpa de burka, una prenda extranjera en Afganistán, se estaban perdiendo tradiciones locales que incluían otro tipo de pañuelos y adornos que sí permitían no solo ver la cara a la mujer, sino mostrar incluso parte de su cabello.

Lo que vemos hoy en día es fundamentalismo financiado por países como Arabia Saudí.

baraja

El hiyab es un símbolo de una religión machista cuando no directamente misógina.

Una mujer que lleva hiyab "por decisión propia" está haciendo apología de una religión que la considera inferior al hombre.

Fernando_x

#5 Una mujer que lleva hiyab "por decisión propia" está haciendo apología de una religión que la considera inferior al hombre.

Exacto. Y mientras siga existiendo la libertad religiosa, tiene derecho a creer en todas las mierdas que quiera.

baraja

#6 Y mientras siga existiendo la libertad religiosa, tiene derecho a creer en todas las mierdas que quiera.

Efectivamente.

Pero que no me vengan con que eso es feminista porque no lo es.

Uno no puede ir de vegano por la vida y llevar una estola de visón. O feminismo, o hiyab, las dos cosas no son compatibles.

Nova6K0

#6 A lo mejor es que esa libertad religiosa debería desaparecer, en el ámbito público, y respecto al Estado.

Saludos.

Fernando_x

#10 Uff, no. Para nada. Esas medidas son totalmente contraproducentes. La gente desea más lo que se le prohibe. Porque si se prohíbe por algo será. La religión irá desapareciendo a base de educación, no de imposición.

cromax

#6 #5 No necesariamente. Es una costumbre social, un hábito de vestimenta como los tenemos aquí.
Nada te impide llevar falda pero no veo a muchos hombres con falda (y es muy cómoda con calor).
Otra cosa es que yo, en efecto, no veo el hiyab como algo a reivindicar.

perico_de_los_palotes

#5 El hiyab es un símbolo de una religión machista cuando no directamente misógina.

Exactamente lo mismo que el cruficijo -> https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-59073226

Pero ese no es el problema. Cada uno es muy libre de ser todo lo masoquista que quiera en la esfera privada, ya sea la religiosa o la sexual.

Lo que si es problematico es que llevar ese atuendo es de obligado cumplimiento en diversas teocracias medievales existentes a dia de hoy. Desde mi punto de vista, es el equivalente a llevar una cruz gamada como "opcion personal en libertad".

/Dicho lo cual, muchos de los que atacan furibundos el islam luego no tienen problemas en apoyar a equipos de fútbol y eventos deportivos patrocinados precisamente por esas mismas teocracias medivales. Lo cual me resulta igualmente hipócrita.

Tuatara

Las religiones son veneno contra la igualdad. Cualquier persona que sea de verdad progresista y de izquierdas estará en contra de la religión como modo de vida, sólo aceptable como un folclore y un interés puramente histórico-cultural.

Creer en seres imaginarios y que estos te impongan en la realidad un modo de vida, que además obliga a que la mitad de la especie humana viva subyugada es demencial.

No hay argumentación posible para que, sin comerse 100 toneladas de hipocresía y demagogia, puedas defender desde la izquierda, desde el progreso, desde el feminismo, el atuendo religioso. Intentar vender la mantita en la cabeza como un símbolo de libertad me produce arcadas.

Me hace cuestionarme si esa gente que otras veces, dice cosas que tanto me gustan, tienen en realidad repajonera idea de lo que están diciendo, y de si son tan patéticos de hacer estas cosas por no entender que lo que tiene la derecha radical es un problema de racismo y clasismo. Que no van contra la mujer con la mantita en la cabeza por ser musulmana. Van por ella por ser mujer oscura y pobre.
Esa misma mantita en la cabeza les parece estupenda cuando la lleva un jeque recién bajado de su jet privado.

No acaban de entender que es un problema de clases, hostia.

baraja

#8 El problema con la religión es que hay millones de personas que la tienen interiorizada como algo suyo, íntimo y personal.

Desde pequeños les han comido el coco y ahora son incapaces de librarse de ese lavado de cerebro que son las religiones.

Un político que diga en voz alta lo que son en realidad las religiones, todas, tendrá muy pocos votos de esos millones de abducidos por la religión.

Amonamantangorri

#12 Un asunto problemático es cuando organizaciones políticas juegan a fichar a ciertas figuras para cubrir la cuota de la diversidad religiosa. No quieren a moros agnósticos o ateos de izquierdas, que los hay a montones, no; quieren practicantes.

El Hachmi, que llegó a Cataluña con 8 años y hoy es una escritora que produce en dos lenguas romances, no vale. No tiene pinta de representar a "su comunidad" como conviene.

Mejor fichar a mujeres musulmanas activistas del hiyab, relacionadas con los Hermanos Musulmanes y similares.

Shinu

Está bien que lo diga ella porque, como suele ocurrir en este tipo de asuntos, solo se toma en cuenta la opinión de los están "dentro". Si lo mismo que dice ella lo hubiese dicho un político de derechas, hubiese sido despachado con un "facha" y a otra cosa.

Tuatara

#11 Es que coincidir en el objetivo no significa compartir el origen.

Shinu

#13 Y..?

Tuatara

#15 ...y todo.
Eso es una diferencia fundamental.

Shinu

#18 Lo que quiero decir es que la crítica solo se acepta cuando viene de dentro. En este caso ella es de origen marroquí, por lo que su opinión no será descartada ipso facto.

Tuatara

#20 Y aunque no es lo ideal, es lo esperable. Desde la derecha española la crítica viene manchada de un tufillo racista y clasista que se han ganado a pulso. Es el mismo tufillo que tiene confundidos a los que se autoproclaman de izquierdas en este mismo país, y se pegan un tiro en el pie.

Así que tristemente, es razonable que esta mujer se sienta sola políticamente hablando, cuando habla de estos temas. La supuesta izquierda la ha abandonado, y a la derecha sólo le interesa como ariete.

Shinu

#21 Es así (más o menos), aunque yo hablaba en general, no solo para este tema en concreto.

T

Siendo hombre blanco occidental, creo que cualquier opinión puede ser meterse en un jardín o directamente linchamiento mediático. Casi pararme a pensar en lo que dice la escritora me hace pensar en cómo va eso de legalitas que anuncian.

nilien

Pues es un tema muuy complejo. Y entiendo la postura de esta escritora, pero personalmente no me gusta la idea de obligar o de forzar a la gente a que se quite o se ponga prendas de vestir, sean del tipo que sean. Y ella parece más por la labor de prohibir y obligar a quitar que de educar o convencer. Y no lo veo, la verdad.

Y entiendo que algunas de las mujeres a las que critica muy duramente no necesariamente están a favor del hiyab (de hecho, me suena que alguna de ellas es crítica al respecto), pero tampoco se considerarán quienes para decirles a otras mujeres que se lo quiten, o promover que se las obligue a quitárselo. Igual que defenderán que otras mujeres enseñen lo que les dé la gana y más si esa es su decisión. Que sí, que hay mucho más detrás, imposiciones culturales, sumisión, etc., ¿pero realmente se logra un resultado positivo obligando legalmente a una cosa u otra? Pregunto, no sé, habría que verlo, pero me cuesta concebirlo.

Una cosa en la que creo que tiene mucha razón es en cómo el hiyab y otros signos de identidad similares se convierten en marcadores de diversidad, y estereotipan y condicionan...