No está permitido que una mujer hable en la Iglesia, ni le está permitido enseñar, ni bautizar, ni ofrecer la eucaristía, ni reclamar para sí una participación en las funciones masculinas y mucho menos en el sacerdocio.
Tertuliano, padre de la iglesia.
Comentarios
No permito que la mujer enseñe ni que domine al hombre. Que se mantenga en silencio. Las mujeres callen en la asamblea.
I Tim 2, 9-15
De aquellos polvos vienen éstos lodos.
Qué paradoja la de este cartaginés vetar la palabra a las mujeres y llamarse Tertuliano.
Unas décadas más tarde el hispano Prisciliano, obispo de Ávila, promovería lo contrario. Y eso le costó la vida.
Tertuliano tenía que ser el hideputa
Que se monten su propia religión, la católica es la que es. Pretender cambiarla o modificarla dice mucho de lo creyentes que son.