Hace 2 años | Por --677540-- a lavanguardia.com
Publicado hace 2 años por --677540-- a lavanguardia.com

El planteamiento de Otra ronda es algo loco. Parte de una premisa supuestamente científica cuyo presunto autor, Finn Skårderud, ha desmentido aunque sin dejar de sonreír ante la tergiversación de sus palabras a favor de una película que le ha encantado; según la libre traducción de Skårderud por parte de uno de los personajes, el ser humano nace con un déficit de alcohol en la sangre que todo deberíamos compensar con unos vinitos o unas birras, cada día, de manera sostenida. ¡A quién se le ocurre!

Comentarios

La teoría de ese señor es lo de menos, sirve de hilo conductor de la película y le da un toque humorístico pero no va más allá. La película va de la relación de los daneses con el alcohol. Desde el alcoholismo salvaje de los jóvenes a la bebida como consuelo de cincuentones en crisis, de la diversión a la adicción, y de lo que ayuda en las relaciones sociales contrapuesto a lo que no puede resolver.

A

#1 El alcohol es un protagonista más, unas veces este protagonista ayuda a quien se relacciona con él y en otras le destruye o le deja tirado en el momento en que debería ayudarle a recomponerse.