Hace 8 años | Por israelf a elespanol.com
Publicado hace 8 años por israelf a elespanol.com

Para el consumidor es bueno. Para el productor, malo. Esta simple interpretación emerge del abaratamiento de los precios energéticos y de las principales materias primas, pero sus efectos colaterales se multiplican. Hay un reverso tenebroso especialmente dañino.