Hace 5 años | Por --507437-- a enriquedans.com
Publicado hace 5 años por --507437-- a enriquedans.com

En el Netexplo Innovation Forum 2019 en la UNESCO, tuve la oportunidad de participar en la presentación de una de las compañías premiadas a las que había puntuado mejor en el proceso de selección, la empresa israelí D-ID, y de conocer a uno de sus co-fundadores, Gil Perry. La compañía, fundada hace unos dos años, se dedica a la “des-identificación” de fotografías: sus algoritmos generan modificaciones imperceptibles en las fotos que impiden que las caras que se muestran en ellas sean reconocidas por los algoritmos de reconocimiento facial.

Comentarios

Wintermutius

La tecnología me parece muy interesante, pero creo que hay 2 factores por los cuales podría no tener mucho recorrido:

1 - Conforme avanza la inteligencia artificial, la tecnología de identificación biométrica será capaz de encontrar esas diferencias, porque trabajará de forma más parecida a los humanos. Si nosotros podemos reconocer una foto de alguien des-identificado, las tecnologías, también.

2 - La tecnología de des-identificación, es un algoritmo, igual que la identificación biométrica. No tardará alguien en añadir, al algoritmo de identificación biométrica, un algoritmo inverso para contrarrestar el efecto de la des-identificación.

Pilfer

#1 y ellos no tardarán en añadir contramedidas a esas contramedidas, es un bucle que se retroalimenta...

D

Me recuerda al hacker del anime Ghost in the shell. Aunque este directamente trastocaba el sistema de una manera distinta.

Acuantavese

Es decir, inteligencia cero, capacidad de aprendizaje cero

aritzg

La verdad es que hay pocos escenarios en los que le veo sentido. Si una cámara de un sistema de identificación te saca una foto, como injects el sistema de D-ID?