Con nocturnidad y discreción, los Ministros de Exteriores de Francia (Jean-Marc Ayrault) y Alemania (Frank-Walter Steinmeier) han acordado bilateralmente una serie de propuestas que contradicen radicalmente el modelo de Unión Europea que nos han venido vendiendo los euroburócratas desde hace décadas.
Si este caso se estuviera gestando tal y como se informa, sería un grave atentado contra aquella idea de la Europa Unida y solidaria que tenemos en la cabeza, pero por otro lado entra dentro de una coherencia, analizando lo que hoy en día es Europa.
Querer juntar a los países más desarrollados y prósperos económicamente y hacer una Liga A de estos Estados para que puedan prosperar, y meter una Liga B donde estén los países gobernados históricamente por incompetentes corruptos que han malversado, robado, malgastado y desperdiciado las ayudas económicas de la UE, que han llevado a sus países a la ruina, por ineptos y por gobernar para la casta, que se queden fuera y no contaminen, es hasta entendible.
Dejarlos fuera de esta liga A pero con las perspectivas de que si logran cumplir unos requisitos, es decir, de ser países serios y no de pandereta, del Pepe que enchufa al sobrino en el ayuntamiento o le concede unos trabajitos a dedo, un país que reduzca considerablemente su déficit, que luche contra la corrupción, que sea un país decente donde no hayan chanchulleos, tejemanejes y sobres por la espalda, donde las políticas no estén supeditadas al interés de unos pocos para perjuicio de muchos, entonces tal vez esa meritocracia pueda tener un sentido.
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Si este caso se estuviera gestando tal y como se informa, sería un grave atentado contra aquella idea de la Europa Unida y solidaria que tenemos en la cabeza, pero por otro lado entra dentro de una coherencia, analizando lo que hoy en día es Europa.
Querer juntar a los países más desarrollados y prósperos económicamente y hacer una Liga A de estos Estados para que puedan prosperar, y meter una Liga B donde estén los países gobernados históricamente por incompetentes corruptos que han malversado, robado, malgastado y desperdiciado las ayudas económicas de la UE, que han llevado a sus países a la ruina, por ineptos y por gobernar para la casta, que se queden fuera y no contaminen, es hasta entendible.
Dejarlos fuera de esta liga A pero con las perspectivas de que si logran cumplir unos requisitos, es decir, de ser países serios y no de pandereta, del Pepe que enchufa al sobrino en el ayuntamiento o le concede unos trabajitos a dedo, un país que reduzca considerablemente su déficit, que luche contra la corrupción, que sea un país decente donde no hayan chanchulleos, tejemanejes y sobres por la espalda, donde las políticas no estén supeditadas al interés de unos pocos para perjuicio de muchos, entonces tal vez esa meritocracia pueda tener un sentido.
Le dejamos los vinos, la lengua, la gastronomía a los gabachos y la cerveza, la economía y los derechos sociales a los teutones.
Yo así lo veo bien. Que venga el superestado y termine lo que Napoleón y Hitler dejaron a medias.
El supuesto documento filtrado que se cita en el artículo http://www.dailysquib.co.uk/wp-content/uploads/2016/06/DokumentUE-2.pdf
Vaya tela, Francia y Alemania con Italia, Benelux y seguramente Suiza nos hacen un corte de manga y se piran, apañaos vamos con la europeseta.