Publicado hace 14 años por tipen a elblogdetipen-andres.blogspot.com

He leído que una taiwanesa intentó suicidarse rociándose con gasolina en la calle y, ya empapada, comprobó que había olvidado el encendedor. Pidió fuego a un transeúnte que la observaba y el hombre se excusó muy orientalmente: "Lo siento, no fumo". La providencia es caprichosa. Si este buen hombre hubiese fumado, tengo la seguridad de que hubiese regalado una cerilla a aquel prototipo de antorcha. La moraleja es que el tabaco puede matar de diversas formas. A mí por ejemplo me matan quienes no permiten fumar a una milla náutica de ellos. Suelen

Comentarios

mindframe

Lo siento amigo, los que nos consideran asesinos tirarán esto del tirón. Al menos tienes mi voto...

t

la noticia es la misma, pero si lo lees con detenimiento es mi comentario sobre la noticia