El abuelo de Omar era barrenista, uno de los trabajos más duros en la mina. Trazaba las galerías que después un artillero abría explotando dinamita. Hoy tiene 85 años y grado tres de silicosis, una enfermedad crónica y extendida entre los mineros por respirar polvo de sílice. Raúl, el padre de Omar, dejó Magisterio por el tajo a solo una asignatura de terminar la carrera —”Cuando volví de la mili era lo más fácil, un trabajo asegurado”—. El azar le puso de tubero, lo suyo era poner tubos de aire comprimido y garantizar ventilación allá abajo.
Comentarios
Hace 60 agnos mi abuela le puso como condición a mi abuelo para casarse que dejara la mina porque no se quería casar para ser viuda de minero, a pesar de que los sueldos eran mucho mayores de lo que podia ganar en otro sitio, ella le prefería a el. Morian como moscas. Aquello era una fabrica de viudas y huérfanos, o de enfermos crónicos ya sea de silicosis o de alcoholismo. Lo del alcoholismo en las cuencas mineras es la leche.
Yo prefiero un hijo o un marido en el paro que en la mina, y para mi misma tengo formas de suicidarme mas agradables.
Supongo que no soy la única.
#4 mi abuelo siempre contaba: que siendo joven entro a la mina, bajo un dia y se jubilo en Ensidesa
#6 El mio se jubilo de ferroviario en Ensidesa.
#7 los dos mios eran soldadores
Es que ese filón está casi agotado.
Siempre viene bien tener "conocimiento experto" en la familia a la hora de diseñar robots mineros... Porque seamos sinceros, eso de bajar a minas subterráneas a extraer materiales es un trabajo peligroso que no debería realizar un humano.
La mina da para mucha canción y mucha épica, pero cómo vida tiene que ser una puta mierda. Normal que se busquen otra salida que, por mal futuro que se le vea, tendrá más que el carbón.
Cierran las minas de carbón pero porque ha dejado de ser rentable (ya no lo es si no contasemos las ayudas). Ahora esta vida épica que comenta #1 la vivirán en África y Sudamérica extrayendo el coltán