La trabajadora sexual afirma que la nueva legislación que prohíbe la prostitución en Irlanda del Norte, criminaliza el oficio de miles de mujeres: "Hago esto porque creo que cuando dos adultos consienten tener sexo a puertas cerradas, independiente del intercambio de dinero, no es un asunto del estado. La ley que han creado no tiene nada que ver con las personas que deciden llevar a cabo el acto, sino que es un aborrecimiento moral del partido DUP (Partido democrático Unionista) a las relaciones sexuales pagadas".
Comentarios
"no es un asunto del estado."
Y asi debiera ser; en muchos aspectos el estado se mete en la vida particular de los ciudadanos con cuaquier excusa, incluso excusas morales y religiosas, nos quieren domesticar y ya estamos demasiados amaestrados. Hay que defender los derechos y libertades civiles.
Pues que se venga a vivir a España, que esto es una casa de putas.
Pues aquí no digamos.