Más de 2.500 pasajeros y 1.000 empleados. Un crucero es una pequeña ciudad flotante, pero a diferencia de cualquier urbe, las gigantescas naves son también un lugar exclusivamente dedicado al recreo y a la diversión, apartado de lo cotidiano y de donde no se puede escapar, así como un emplazamiento móvil lejos de la legislación de cualquier Estado. Estos dos factores convierten a estas embarcaciones en un edén de la exuberancia donde sus habitantes, tanto turistas como trabajadores, se sienten muy dispuestos a dejar en sus respectivos países.
Comentarios
Los cruceros no me atraen nada. Se junta todo lo que no me gusta del turismo: las tiendas, las discotecas, encontrarte una y otra vez con los mismos otros turistas, las atracciones y animaciones cutres...
#1 La gracia de los cruceros es que puedes visitar varios lugares en un sólo viaje.
#2 Ya, pero se quedan en eso: visitas. Tienes tiempo justo de ver los monumentos más famosos de una ciudad, pero no a conocerla bien y sentirla. Por ejemplo, yo prefiero pasar 10 días en Roma, que hacer un crucero visitando a todo correr 10 ciudades del Mediterráneo.
#3 ¡¿Diez días en Roma?! Pues definitivamente los cruceros no son para ti.
#6 A eso me refiero. Veo a la gente de los cruceros y otros viajes organizados llegar a una ciudad y visitar con prisas los tres monumentos más famosos y salir pitando. Todo esto, por supuesto, en grupo y con un guía que les indica lo que deben ver, lo que tienen que hacer y hasta dónde y qué comer. Seguro que terminan su viaje con muchísimas fotos en lugares emblemáticos, pero no creo que conozcan el "alma" de ninguno de los sitios que han visitado. Y tampoco habrán conocido a ningún lugareño, excepto tal vez al guía (si es que es local), al que considerarán un amigo para toda la vida, aunque él se olvide de cada rebaño de turistas en cuanto cogen el avión de vuelta. Ese tipo de viaje me parece superficial, vano y estresante.
Diez días para conocer Roma es muy poco. Si pudiera, pasaría allí un invierno entero.
#1 No te preocupes. Ir es opcional.
#4 Cómo se nota que eres soltero.
La última frase de la entradilla está mal construida:
Estos dos factores convierten a estas embarcaciones en un edén de la exuberancia donde sus habitantes, tanto turistas como trabajadores, se sienten muy dispuestos a dejar en sus respectivos países
¿Qué es exactamente lo que sus habitantes, tanto turistas como trabajadores, se sienten muy dispuestos a dejar en sus respectivos países? La frase subordinada no tiene sentido.