Él odio al reggaeton del meneante medio y en contraposición su amor por el rock anglosajón deja bastante claro las distancias con la sociedad española en general sobretodo con las nuevas generaciones que en cierto sentido no les da miedo lanzarce un reggaeton, un trap o lo que sea. Felicidades eruditos y conocedores de la buena música, bravo 👏 👏 👏
#5 No es odio. Es hastío. A nadie que le guste la buena música le importa el reguetón. Es otro de tantos estilos insulsos e irrelevantes. Pero cuando algo se pone de moda lo ponen en todos lados hasta que aburre y resulta repetitivo y molesto. A eso le añades que su calidad musical es más bien baja y ya tienes un producto que va a ser el objetivo de las críticas cada vez que suene el autotune pasado de rosca en cualquier bar, anuncio o programa.
Comentarios
Yo sigo mi particular cruzada y dejo esto por aquí:
#3 Tío, esto es buenísimo.
#3 Me he puesto eso, a veces, para jugar al Skyrim.
¿Qué pinta aquí la honestidad? ¿Es posible hablar deshonestamente del reggaeton? ¿Podemos hablar con deportividad de la denostada canción ligera?
#1 Se refiere a sin prejuicios, lo cual está muy bien para analizar los temas y obtener buenas conclusiones.
Eso, hablemos honestamente sobre el Reggaeton... Parece que hoy haya una campaña en Meneame para strikear al personal.
Él odio al reggaeton del meneante medio y en contraposición su amor por el rock anglosajón deja bastante claro las distancias con la sociedad española en general sobretodo con las nuevas generaciones que en cierto sentido no les da miedo lanzarce un reggaeton, un trap o lo que sea. Felicidades eruditos y conocedores de la buena música, bravo 👏 👏 👏
#5 Hay tantas falacias en tu argumento que mi propia respuesta es una falacia. Qué pereza.
#5 El reggaeton es como el ketchup, te puede gustar pero sigue siendo mierda.
#7 O como las Ketchup.
#5 No es odio. Es hastío. A nadie que le guste la buena música le importa el reguetón. Es otro de tantos estilos insulsos e irrelevantes. Pero cuando algo se pone de moda lo ponen en todos lados hasta que aburre y resulta repetitivo y molesto. A eso le añades que su calidad musical es más bien baja y ya tienes un producto que va a ser el objetivo de las críticas cada vez que suene el autotune pasado de rosca en cualquier bar, anuncio o programa.