Facturas, tiques, albaranes, justificantes, billetes que confirmen un viaje o reservas de hoteles. Cualquier organización o Gobierno que reciba subvenciones de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) está obligado a justificar hasta el último céntimo desembolsado. La tarea es más difícil de lo que parece y decenas de instituciones en todo el mundo no son capaces de acreditar de manera convincente cómo gastaron su dinero.
Comentarios
Otro chiringuito.
Es que el problema se las trae. Si aqui a veces es dificil que un fontanero te haga la factura,¿ como debe ser en el tercer mundo?