En este estudio, intentan determinar si hombres y mujeres adoptan diferentes estrategias al tomar decisiones morales. Para ello analizan sus respuestas a cuatro dilemas morales. La conclusión es que sí adoptan estrategias diferentes. Los hombres son más consecuencialistas y las mujeres más deontologistas. [Resumen traducido en los comentarios].
“El resultado más interesante es que los juicios morales de los hombres y las mujeres fueron significativamente diferentes. Por ejemplo, las mujeres juzgaban la acción de matar como menos aceptable, aunque pudiera conducir a su salvación y a la de otros. En cambio, los hombres eran más consecuencialistas en sus opciones morales, prestando más atención a su salvación y a la del grupo al que pertenecían. Las elecciones de los hombres estaban más orientadas hacia los propósitos utilitarios más beneficiosos, aunque pudieran conducir a acciones violentas y dolorosas (matar a una niña asfixiándola o elegir a qué niño sacrificar).
Las mujeres consideraban menos aceptable la transgresión (robar en la farmacia para obtener la medicina necesaria para la supervivencia del niño. Este resultado puede parecer sorprendente e incluso contrario a la intuición. Sin embargo, hay que considerar dos aspectos. En primer lugar, en este caso, la transgresión implicó un comportamiento violento (robo de la farmacia). Cabe señalar que se ha comprobado que las mujeres muestran una menor propensión que los hombres a los comportamientos que implican violencia física y se oponen más al riesgo. En segundo lugar, el concepto de orientación asistencial no se relaciona solo con la relación diádica madre-hijo, sino como una predisposición general a considerar la responsabilidad y el apego a los demás, con una mayor implicación de los procesos afectivos, como la empatía. Estudios recientes han demostrado una mayor activación de las regiones cerebrales en las mujeres que se asocian en general con el procesamiento de información basada en la atención y una mayor activación en los hombres que se relacionan con una orientación basada en la justicia.
Nuestra investigación muestra claramente que hombres y mujeres difieren significativamente en la implicación emocional. La medida del compromiso (implicación, motivación e interés en la historia) fue significativamente mayor en las mujeres que en los hombres. Los resultados pueden estar relacionados con diferencias de género en cuanto a la capacidad empática, que hacen que las mujeres se resistan más a tomar decisiones que son racionalmente viables pero que implican infligir directamente dolor físico o moral a otros individuos. Cuando las mujeres evaluaron su estado emocional tras cada dilema, mostraron mas propensión a experimentar emociones como la tristeza y el miedo.Por tanto, las mujeres tienden a experimentar emociones disfóricas más que los hombres, lo que podría afectar sus elecciones éticas. En todos los dilemas, las elecciones de las mujeres han estado más influenciadas por emociones sociales como la empatía, la culpa y la vergüenza. La moralidad orientada al cuidado, impulsada por influencias emocionales, está más cerca de la ética deontológica (¡No asesinarás! ¡No robarás!). Por el contrario, el juicio moral de los hombres está más alejado de los procesos emocionales, por lo que está más orientado a los procesos cognitivos y a las elecciones utilitarias.
#3 Las normas de Menéame no permiten los muros de pago, se supone que las noticias han de estar accesibles con sólo hacer click en ellas, ¿Quieres que la edite como autodescartada?
Las mujeres protegen menos la vida. Es algo que siempre me ha llamado mucho la atención.
Aparte de eso nunca he visto diferencias significativas. Otra cosa que existe, el dar más importancia a las agresiones verbales, no lo en cuadro en el plano de lo moral, es ortogonal a eso.
Comentarios
#4 Gracias por el consejo. Saludos.
#5 Saludos!
“El resultado más interesante es que los juicios morales de los hombres y las mujeres fueron significativamente diferentes. Por ejemplo, las mujeres juzgaban la acción de matar como menos aceptable, aunque pudiera conducir a su salvación y a la de otros. En cambio, los hombres eran más consecuencialistas en sus opciones morales, prestando más atención a su salvación y a la del grupo al que pertenecían. Las elecciones de los hombres estaban más orientadas hacia los propósitos utilitarios más beneficiosos, aunque pudieran conducir a acciones violentas y dolorosas (matar a una niña asfixiándola o elegir a qué niño sacrificar).
Las mujeres consideraban menos aceptable la transgresión (robar en la farmacia para obtener la medicina necesaria para la supervivencia del niño. Este resultado puede parecer sorprendente e incluso contrario a la intuición. Sin embargo, hay que considerar dos aspectos. En primer lugar, en este caso, la transgresión implicó un comportamiento violento (robo de la farmacia). Cabe señalar que se ha comprobado que las mujeres muestran una menor propensión que los hombres a los comportamientos que implican violencia física y se oponen más al riesgo. En segundo lugar, el concepto de orientación asistencial no se relaciona solo con la relación diádica madre-hijo, sino como una predisposición general a considerar la responsabilidad y el apego a los demás, con una mayor implicación de los procesos afectivos, como la empatía. Estudios recientes han demostrado una mayor activación de las regiones cerebrales en las mujeres que se asocian en general con el procesamiento de información basada en la atención y una mayor activación en los hombres que se relacionan con una orientación basada en la justicia.
Nuestra investigación muestra claramente que hombres y mujeres difieren significativamente en la implicación emocional. La medida del compromiso (implicación, motivación e interés en la historia) fue significativamente mayor en las mujeres que en los hombres. Los resultados pueden estar relacionados con diferencias de género en cuanto a la capacidad empática, que hacen que las mujeres se resistan más a tomar decisiones que son racionalmente viables pero que implican infligir directamente dolor físico o moral a otros individuos. Cuando las mujeres evaluaron su estado emocional tras cada dilema, mostraron mas propensión a experimentar emociones como la tristeza y el miedo.Por tanto, las mujeres tienden a experimentar emociones disfóricas más que los hombres, lo que podría afectar sus elecciones éticas. En todos los dilemas, las elecciones de las mujeres han estado más influenciadas por emociones sociales como la empatía, la culpa y la vergüenza. La moralidad orientada al cuidado, impulsada por influencias emocionales, está más cerca de la ética deontológica (¡No asesinarás! ¡No robarás!). Por el contrario, el juicio moral de los hombres está más alejado de los procesos emocionales, por lo que está más orientado a los procesos cognitivos y a las elecciones utilitarias.
#2 Gracias por la traducción
En verdad es interesante
#2
Gracias.
Resumen: hombres más racionales, mujeres más emocionales.
¿A alguien le sorprendre?
#8 en resumen, las mujeres son menos sinceras cuando realizan encuestas.
#10 Ya la descarto yo. Gracias.
#0 muro de pago
#1 [Resumen en los comentarios]
#3 Mírate las normas de Mnm
#3 Las normas de Menéame no permiten los muros de pago, se supone que las noticias han de estar accesibles con sólo hacer click en ellas, ¿Quieres que la edite como autodescartada?
Las mujeres protegen menos la vida. Es algo que siempre me ha llamado mucho la atención.
Aparte de eso nunca he visto diferencias significativas. Otra cosa que existe, el dar más importancia a las agresiones verbales, no lo en cuadro en el plano de lo moral, es ortogonal a eso.