A veces nuestra incoherencia en temas de alimentación llega a tales extremos que resulta simplemente absurda. Y, lamentablemente, ocurre con frecuencia incluso con nuestros seres más queridos, nuestros hijos. Les voy a poner un ejemplo: Mis hijas participan en actividades de deporte escolar, algo que es motivo de satisfacción para cualquier padre porque contribuye a su bienestar y salud. Pero al finalizar las competiciones (carreras de cross), estos son los "regalos" que ha ido recibiendo una de ellas (de 11-12 años de edad)

Comentarios

D

Dónde habrán quedado los bocatas de mortadela que me (¿nos?) daban en los 80...

w

#2 Entre vegetarianos, musulmanes, intolerantes a la lactosa, alergias varias y celiacos...en el olvido ...Que pretendes...¿Matarlos?

Saludos

w

No entiendo la ira del autor en el caso del caldo de Jamón y el aquarius

Saludos