Durante noviembre y diciembre de 2014 el fotógrafo argentino Pablo Ernesto Piovano recorrió zonas rurales de Argentina para retratar a las familias afectadas por las fumigaciones con agroquímicos. Las constantes fumigaciones con agroquímicos como el glifosato y el 2.4D, no sólo generan un efecto en los cultivos, sino que también multiplican de dos a cuatro veces el promedio nacional de las tasas de cáncer y otras enfermedades graves en trabajadores agrarios y pobladores, quienes sufren de malformaciones o afecciones en la piel.
El tema de los agrotóxicos es muy grave, como se explica en el vídeo, aunque por aquí no sea muy popular, basta con ver que las noticias sobre el Glifosato no suelen llegar a portada. Este tema también esta incluído en las negociaciones del TTIP.
Se esta dando a entender que el Glifosato es el causante del problema, cuando es un herbicida muy seguro, no se ha demostrado su relación directa con el cáncer (la OMS lo cataloga en el grupo de posiblemente cancerígeno, el mismo grupo en el que se encuentra la carne roja y ejercer la profesión de peluquero) El tabaco sin ir mas lejos es cancerígeno y absorbemos al dia dosis mucho mas altas de él que de Glifosato.
Aun diciendo que el glifosato, usado correctamente es inocuo hay que decir que los herbicidas alternativos siendo mucho menos eficaces son sin embargo mas toxico , empezando por el presunto herbicida ecológico y natural llamado vinagre que algunos ayuntamientos proponen como alternativa.
Y si, estamos rodeados de Glifosato, su patente caducó a principios de siglo y por tanto su fabricación no necesita pagar derechos. Acercaros a la sección de plantas de vuestro supermercado favorito y veréis como los herbicidas de la estantería tienen a Glifosato como principal principio activo, pero si os acercáis a la sección de bebidas veréis que la mayoría de ellas tienen un 90% de H2O o mas, cuando esa peligrosa molécula se ha demostrado mortal si ingieres mas de 7 litros de ella en menos de un par de horas. Como sabéis , el veneno está en la dosis.
#3 Pero es que los herbicidas a base de glifosato contienen desde un 36% a un 50 y pico % de glifosato el resto son aceites que pueden ser desde oleato de potasio (muy seguro) a aceite de parafina y aceites minerales que sí pueden ser cancerígenos según precio, claro
Y dado que se venden con unas condiciones de utilización: pulverizar las hierbas a matar únicamente en caso de componentes cancerígenos. Se puede usar cultivos resistentes al glifosato y usar herbicida a base de glifosato del barato que no se ha de pulverizar sobre las plantas del cultivo (que se suponen NO resistentes) sino sobre las hierbas (y las plantas cultivadas y pulverizadas por error quedar dañadas al usarse como toca)
El problema es si se usa mal
Por otra parte el 2,4-D es una hormona vegetal sintética de crecimiento de raíz. Pero los vegetales contienen su hormona equivalente natural pero demasiada baja cantidad para ser usado como herbicida sacado y purificado de los vegetales así que se ha de sintentizar necesariamente si se quiere usar (se trata de forzar su crecimiento excesivamente para que muera del sobreesfuerzo, vamos una forma de hormesis -nada que ver con la homeopatía-)
El caso es que con mecanismos de fabricación muy baratillos aparecía un residuo a veces muy cancerígeno llamado "Dioxina" coloquialmente y con un nombre completo un poco abracadabrante... Que contamina años y es muy peligroso si aparece. el 2,4-D no tiene porque contener nada de "dioxinas" cancerígenas si se fabricara bien con procedimientos correctos otra cosa es que no se haga)
¿el problema es de los fitosanitarios concretos o del sistema económico que lleva a mala praxis sobre los mismos?
POrque los tóxicos más potentes y peligrosos (con diferencia) que existen son curiosamente totalmente naturales
¿si no se sabe usar algo bien y se acaba abusando y dañando a la gente de esta forma se ha de prohibir su uso de forma radical o legislar y controlar mejor o que se haga de otra forma?
Comentarios
El tema de los agrotóxicos es muy grave, como se explica en el vídeo, aunque por aquí no sea muy popular, basta con ver que las noticias sobre el Glifosato no suelen llegar a portada. Este tema también esta incluído en las negociaciones del TTIP.
Se esta dando a entender que el Glifosato es el causante del problema, cuando es un herbicida muy seguro, no se ha demostrado su relación directa con el cáncer (la OMS lo cataloga en el grupo de posiblemente cancerígeno, el mismo grupo en el que se encuentra la carne roja y ejercer la profesión de peluquero) El tabaco sin ir mas lejos es cancerígeno y absorbemos al dia dosis mucho mas altas de él que de Glifosato.
Aun diciendo que el glifosato, usado correctamente es inocuo hay que decir que los herbicidas alternativos siendo mucho menos eficaces son sin embargo mas toxico , empezando por el presunto herbicida ecológico y natural llamado vinagre que algunos ayuntamientos proponen como alternativa.
Y si, estamos rodeados de Glifosato, su patente caducó a principios de siglo y por tanto su fabricación no necesita pagar derechos. Acercaros a la sección de plantas de vuestro supermercado favorito y veréis como los herbicidas de la estantería tienen a Glifosato como principal principio activo, pero si os acercáis a la sección de bebidas veréis que la mayoría de ellas tienen un 90% de H2O o mas, cuando esa peligrosa molécula se ha demostrado mortal si ingieres mas de 7 litros de ella en menos de un par de horas. Como sabéis , el veneno está en la dosis.
Os recomiendo la lectura del blog de J.M. Mulet http://jmmulet.naukas.com/
Un saludo
#3 Pero es que los herbicidas a base de glifosato contienen desde un 36% a un 50 y pico % de glifosato el resto son aceites que pueden ser desde oleato de potasio (muy seguro) a aceite de parafina y aceites minerales que sí pueden ser cancerígenos según precio, claro
Y dado que se venden con unas condiciones de utilización: pulverizar las hierbas a matar únicamente en caso de componentes cancerígenos. Se puede usar cultivos resistentes al glifosato y usar herbicida a base de glifosato del barato que no se ha de pulverizar sobre las plantas del cultivo (que se suponen NO resistentes) sino sobre las hierbas (y las plantas cultivadas y pulverizadas por error quedar dañadas al usarse como toca)
El problema es si se usa mal
Por otra parte el 2,4-D es una hormona vegetal sintética de crecimiento de raíz. Pero los vegetales contienen su hormona equivalente natural pero demasiada baja cantidad para ser usado como herbicida sacado y purificado de los vegetales así que se ha de sintentizar necesariamente si se quiere usar (se trata de forzar su crecimiento excesivamente para que muera del sobreesfuerzo, vamos una forma de hormesis -nada que ver con la homeopatía-)
El caso es que con mecanismos de fabricación muy baratillos aparecía un residuo a veces muy cancerígeno llamado "Dioxina" coloquialmente y con un nombre completo un poco abracadabrante... Que contamina años y es muy peligroso si aparece. el 2,4-D no tiene porque contener nada de "dioxinas" cancerígenas si se fabricara bien con procedimientos correctos otra cosa es que no se haga)
¿el problema es de los fitosanitarios concretos o del sistema económico que lleva a mala praxis sobre los mismos?
POrque los tóxicos más potentes y peligrosos (con diferencia) que existen son curiosamente totalmente naturales
¿si no se sabe usar algo bien y se acaba abusando y dañando a la gente de esta forma se ha de prohibir su uso de forma radical o legislar y controlar mejor o que se haga de otra forma?
Pues en nuestras ciudades fumigan a tope con glifosato y otros agrotóxicos... pero a base de bien. Luego pagaremos las consecuencias.