Hace 2 años | Por Octaviano a lab.elmundo.es
Publicado hace 2 años por Octaviano a lab.elmundo.es

Un chico devoró una treintena de latas de comida de gato. Tragan fertilizante, pintura, cajas enteras de galletas... Y, cuando todos los niños del recreo se ponen a jugar, ellos siguen rebuscando en las papeleras. Comer como una obsesión inagotable. La ingesta como forma de destructiva compulsión. Ahora, por primera vez, una residencia acogerá a pacientes de esta enfermedad rara: el síndrome de Prader Willi.

Comentarios

T

El mayor de los respetos para estos enfermos y sus familias. Menuda putada de enfermedad.

ewok

#2 #4 #5 #7 Los casos extremos de ese síndrome son muy fuertes. Apetito inusual

superjavisoft

He estado de trabajador social 7 años y uno de mis pacientes tenía este síndrome. Si, su cocina era de las que tenían llave, lo vigilaba cuando se levantaba de madrugada y se hacía un café, nunca intentó jugármela, pero sabíamos que dejándolo a solas se atracaria a comida hasta ir al hospital.
En realidad a mi lo que me preocupa es que quemará la casa o me reventar a él coche a pedradas. Cosas que intento hacer en varias ocasiones.

JoulSauron

#8 Lo que comentas de la violencia, ¿sería por consecuencia de la privación de comida? Es decir, si no pueden acceder a comida, ¿se vuelven violentos?

superjavisoft

#10 No lo se francamente, siempre pregunte por sus episodios violentos (No me toco cuidarle a el cuando los tuvo), pero no me supieron responder los motivos, a veces estaba enfadado con alguno de los trabajadores por ejemplo, pero sin causa aparente.

Ferran

No me deja leer la noticia en iOS.

Octaviano

#1 Va un poco extraña la página. Deja que reproduzca las imágenes y ya te deja ir bajando. Merece la pena el reportaje. Es fuerte, eso sí. Saludos.

D

Lo que es un Vasco promedio

D

No me acuerdo si fue en CSI o en Bones pero en un capítulo salía un caso de este tipo

Zappato

Cómo que pintura? Wtf

c

#4 fertilizantes???