Hace 5 años | Por Ripio a agenciasinc.es
Publicado hace 5 años por Ripio a agenciasinc.es

Durante la inmersión, los pulmones de los mamíferos marinos cuentan con mecanismos activos, y no solo pasivos, con los que evitan la enfermedad de descompresión. Dos nuevos estudios, liderados por la Fundación Oceanogràfic, han permitido estudiar a delfines salvajes sin encontrar diferencias fisiológicas entre los que cazan en superficie y los que lo hacen a gran profundidad. Pero el mecanismo podría dejar de funcionar si los animales están estresados.

Comentarios

swapdisk

A ver si alguien que controle, quizás un buzo, me explica algo que no me acaba de cuadrar. Tenía entendido que la descompresión se produce en los buzos que respiran aire presurizado (botellas) por el incremento de tamaño de las burbujas al ascender si no da tiempo a echarlas (lo mismo que pasa al abrir de golpe una botella de cocacola agitada). Que no pasaba en los que bajan en apnea, porque bajan el aire a presión ambiente y se va comprimiendo y descomprimiendo al bajar y subir y ya está. Ahora lo de los delfines, que evidentemente no respiran de botella, me ha descolocado un poco.

¿En dónde tengo el error de concepto? ¿Se produce descompresión también en los buzos que van en apnea?

Pandemial

#1 Cuando se está bajo el agua, aunque sea sin botella, el aire de los pulmones va entrando en el flujo sanguíneo a un ritmo mayor que en superficie, aunque sea un volumen de aire limitado al no estar renovándose, la presión ambiente es la de la profundidad a la que estés, da igual que la hayas inhalado en superficie o de la botella a esa misma profundidad.

En la práctica, la gente no suele aguantar mucho tiempo la respiración ni bajar muy profundo, por lo que el nitrógeno acumulado no es muy elevado y, por tanto, estas apneas no suelen requerir descompresión, pero si se hacen muy profundas, largas y repetidas puede ser.
En el caso de los delfines , según el texto bajan hasta mil de metros de profundidad, realizando inmersiones de hasta 13 minutos con una sola respiración y es por eso que tienen que dirigir el flujo sanguíneo durante la inmersión hacia las zonas del pulmón que han colapsado por la elevada presión, lo que limita el intercambio de gases, incluyendo el nitrógeno.