Ya es muy poco —en realidad, nada— lo que Venezuela puede ofrecer a los jóvenes. Tres comediantes talentosos vieron cómo sus carreras se truncaban mientras el país se desplomaba por la hiperinflación, la escasez de todos los productos, la miseria, los asesinatos, los robos, los presos políticos. Seguirían siendo comediantes, pero primero tendrían que migrar del país y empezar desde cero en otras naciones latinoamericanas. Estas son las historias de Nanutria, Jóse Rafael y Estefanía León.