Publicado hace 7 años por tiopio a tienesganasdeviajarylosabes.blogspot.ie

Visitar Roma y no entrar en ninguna de sus iglesias es como visitar París y no subir a la Torre Eiffel, aunque eso es difícil ya que poca gente se va sin entrar en la Basílica de San Pedro. Es tan fácil como andar por sus calles y entrar a cualquiera de las iglesias que encuentres a tu paso. Contemplar el interior de las basílicas de esta ciudad es un placer que en pocas ciudades se repite. No olvides llevar un pañuelo para cubrirte los hombros y piernas. Seas hombre o mujer no podrás entrar en iglesias con tirantes ni shorts.