Mucha gente ha optado por utilizar alternativas como LibreOffice, que también puede abrir los archivos creados con los programas de Microsoft. Sin embargo, es bastante habitual encontrar problemas de compatibilidad que impidan verlos correctamente, pareciendo que están «rotos» o «corruptos». Es por eso que los responsables de la suite ofimática libre arremeten contra la compañía fundada por Bill Gates, asegurando que los archivos digitales deberían poder abrirse años o décadas después de su creación.