Quizás, solo quizás, nos creemos que el capitalismo es reformable, o "regulable", como afirmaba hoy el politólogo "intelectual" de Podemos, Jorge Verstrynge, en el programa "Al rojo vivo" de la cadena de TV progre por excelencia, programa que más bien deberían llamar "Al rojo muerto" por su manipulación y ofensiva mediática anticomunista. Una ofensiva que es parte de la misma guerra mediática general de los grandes medios de comunicación, ya se proclamen de tendencia conservadora (ultra-liberal) o socialdemócrata (social-liberal), todos ellos
Comentarios
Si se reforma que sea empezando porque uno no pueda cerrar una fábrica y desmantelarla sólo para que la competencia no pueda adquirirla.
Porque los medios de producción no son objetos como quién tiene una bici, sino algo que forma parte de un todo y no se puede manipular así como así. Bien sean del estado (los medios de producción), bien sea con regulaciones estrictas, hay que hacer algo.
No, no lo es, que un grupo de personas vivan a cuerpo de rey sin producir ningún beneficio a la sociedad y acumulen cada vez más no es sostenible.
No, no lo es. El capitalismo no es un sistema de relaciones económicas, sino un conjunto de memes (en el sentido original del término) que se propagan insertos en la cultura hasta formar una hegemonía. Mientras sigamos pensando que 'tienes lo que mereces, si no lo consigues es porque te has esforzado poco'. Mientras haya miedo de que cuando lleguen malos tiempos (el invierno, la vejez, ...) nadie nos vaya a ayudar, sólo dependemos de nuestra capacidad de acumular dinero, tanto tienes, tanto vales. Mientras sea posible sacar rendimiento del capital neto, simplemente prestándolo. Mientras pensemos que los beneficios se deberían repartir únicamente entre el trabajador y el capitalista, porque el rendimiento y la productividad depende del capital acumulado en forma de medios de producción (ya sean unas tierras de labranza neolíticas o la implementación de un complejo algoritmo de I.A,) y del trabajo aplicado, mientras el estado es un mecanismo perverso de robar parte de esos beneficios, no un sistema de reparto eficiente. Mientras sigamos pensando que la desigualdad es intrínsecamente buena porque incentiva el desarrollo tecnológico, y que la 'necesidad es la madre del ingenio'. Mientras pensemos que somos 'dueños de la naturaleza' y que todas las cosas están a la venta, y que su posesión es el único objetivo.
Mientras todas estas mierdas sigan en nuestra sociedad, en nuestra cultura, tan presentes que hacen daño, el capitalismo seguirá, y no parará hasta destruirnos a todos.
Un buen artículo. Pero deja a un lado una cuestión verdaderamente candente. Se muestra lo que el reformismo es en general, y algunos casos. Pero la cuestión, para los que se asuman comunistas -o cómo se le quiera decir-, es saber si vale la pena apoyar o no, y en su caso cómo, los movimientos tipo Syriza. No a partir de la ficción de que tengan viabilidad histórica en una pretensión que se ha mostrado hasta la saciedad imposible a la larga (luchar contra las consecuencias del capitalismo -concentración de la riqueza, poder, etc.- sin tocar su base esencial), sino a partir de considerar si en sus alcances y pretensiones reales sirven o no como preámbulo de cambios ahora sí de fondo. Ese es un asunto más complejo, y debe estudiarse caso a caso.