Artículo que trata de esclarecer los motivos que hacen que sea tan gracioso ver cómo a una persona, ante un viento inesperado, está a punto de salirle volando el paraguas hasta que éste se le acaba dando la vuelta.
Bueno, es solo agua, y si ves a alguien que intenta refugiarse de la molesta lluvia y de pronto, inesperadamente, se queda a la intemperie fallando en lo que pretende, resulta gracioso (como en tantas otras cosas). A eso se le suma el paraguas vuelto del revés, que no está realizando su función mientras la persona lucha con él torpemente, y eso también resulta gracioso (como rsultan otras torpezas). Y, repito, es importante tener en cuenta que solo es agua...
Comentarios
Bueno, es solo agua, y si ves a alguien que intenta refugiarse de la molesta lluvia y de pronto, inesperadamente, se queda a la intemperie fallando en lo que pretende, resulta gracioso (como en tantas otras cosas). A eso se le suma el paraguas vuelto del revés, que no está realizando su función mientras la persona lucha con él torpemente, y eso también resulta gracioso (como rsultan otras torpezas). Y, repito, es importante tener en cuenta que solo es agua...
#1
...es inevitable. Pero te olvidas de decir que si es trump el que sujeta el paraguas, provoca todavía más risa...