La expresión se remonta al reinado de Juana la Loca y Felipe el Hermoso en la Castilla de finales del siglo XV. Como es sabido, Felipe I era un gran mujeriego, algo que su mujer, obviamente, no podía soportar. En aquella época la corte contaba con una gran presencia de conquenses, y algunas de las amantes del rey eran de pueblos limítrofes a esa ciudad, por lo que Felipe I ideó una excusa perfecta para no levantar las sospechas de su mujer.
Menuda manía que tenemos de achacar el origen de los dichos populares a anécdotas protagonizadas por personajes de la alta sociedad.
Me creo antes cualquier otra explicación, como la que mencionan en los comentarios:
La expresión original era poner mirando a la Meca, en alusión a la postura adoptada por los musulmanes durante la oración. Posteriormente se cambió la referencia local a un lugar más cercano.
Comentarios
#0 Es dupe: “Te pongo mirando pa’ Cuenca”: origen
“Te pongo mirando pa’ Cuenca”: origen
emitologias.wordpress.comTiene razón #3. La cierro. Gracias.
Menuda manía que tenemos de achacar el origen de los dichos populares a anécdotas protagonizadas por personajes de la alta sociedad.
Me creo antes cualquier otra explicación, como la que mencionan en los comentarios:
La expresión original era poner mirando a la Meca, en alusión a la postura adoptada por los musulmanes durante la oración. Posteriormente se cambió la referencia local a un lugar más cercano.
A quien habría que poner mirando pa Cuenca es a Felipe.