Un estudio que acaba de lanzarse en un congreso de libreros arroja unos datos escalofriantes: el 86% de los títulos que se publican venden menos de cincuenta ejemplares al año. Sólo el 0,1% llega a los tres mil ejemplares vendidos. La tendencia al frenetismo no ayuda. En la edición tradicional se publican novedades que sepultan las novedades del mes anterior.
Yo por ejemplo llevo una temporada leyendo seriales publicados en la web y no me suena ningún portal en castellano que se dedique profesionalmente a ello, únicamente sitios que recopilan traducciones hechas por fans.
#6 Hay portales de pago, como por ejemplo https://m.webnovel.com/ donde puedes leer unos cuantos capítulos gratis al día o pagar para quitar los límites. Otros como https://www.royalroad.com gestionan donaciones de los lectores para los autores que siguen.
También hay escritores que se lo montan por su cuenta, mediante donaciones o Patreon marcando metas para la publicación del siguiente capítulo o permitiendo leer antes los capítulos publicados a los suscriptores.
Debo ser de los pocos raritos que se compra, al menos, un libro al mes. Pero también compro periódico en papel a diario (he adoptado a mi quiosquero, para que cierre el negocio lo más tarde posible)
Vieron lo que les pasó a sus compañeros del negocio de la cultura: música, cine y series y no se bajaron del burro. Podrían haber reconvertido el negocio y la forma de vender mucho antes que sus compañeros asegurándose sus beneficios, al final decidieron que lo dejaban estar y entre webs de descargas y suscripciones como la de Amazon se han acabado yendo al cuerno
#8 Un escritor no puede dar conciertos, ni escribir un libro al mes.
De hecho, ese es uno de los principales problemas del negocio editorial: los libros tienen una vida promocional muy corta y hay una obsesión brutal por las novedades; si no vende como churros en la semana de promoción que le dedica la editorial de turno, pasa al olvido en pos del siguiente título (siendo las propias editoriales las que se cargan sus productos invisibilizándolos).
Aún así, en la era de la inmediatez y del consumo de contenido vacío, creo que el formato físico está sobreviviendo bastante bien y, lo más importante, está demostrando ser compatible con el formato digital (cosa que no pasó ni con la música ni con el audiovisual).
De todas formas, ya los superventas son muy pocos y menos aún los escritores que consiguen sobrevivir sólo con su prosa. El mercado está muy diversificado (bien) y bueno, vivimos en España, país donde he llegado a escuchar cómo se mofaban de un chico por leer en el parque en vez de estar "jugando a darse empujones" como los demás... como si fuera un inadaptado o algo.
Comentarios
Con esos precios...
El 2010 se editaron unos 110.000 libros.
https://www.republica.com/arealibros/especiales/sabes-cuantos-libros-se-editan-en-espana-cada-ano.html
Se vendieron ese año 228 millones de ejemplares.
https://es.statista.com/estadisticas/473955/numero-de-ejemplares-editados-y-vendidos-espana/
Que hagan conciertos.
¿han probado con otros modelos de negocio?
Yo por ejemplo llevo una temporada leyendo seriales publicados en la web y no me suena ningún portal en castellano que se dedique profesionalmente a ello, únicamente sitios que recopilan traducciones hechas por fans.
#4 pon ejemplo
#6 Hay portales de pago, como por ejemplo https://m.webnovel.com/ donde puedes leer unos cuantos capítulos gratis al día o pagar para quitar los límites. Otros como https://www.royalroad.com gestionan donaciones de los lectores para los autores que siguen.
También hay escritores que se lo montan por su cuenta, mediante donaciones o Patreon marcando metas para la publicación del siguiente capítulo o permitiendo leer antes los capítulos publicados a los suscriptores.
#7 chachi
Debo ser de los pocos raritos que se compra, al menos, un libro al mes. Pero también compro periódico en papel a diario (he adoptado a mi quiosquero, para que cierre el negocio lo más tarde posible)
Vieron lo que les pasó a sus compañeros del negocio de la cultura: música, cine y series y no se bajaron del burro. Podrían haber reconvertido el negocio y la forma de vender mucho antes que sus compañeros asegurándose sus beneficios, al final decidieron que lo dejaban estar y entre webs de descargas y suscripciones como la de Amazon se han acabado yendo al cuerno
#8 Un escritor no puede dar conciertos, ni escribir un libro al mes.
De hecho, ese es uno de los principales problemas del negocio editorial: los libros tienen una vida promocional muy corta y hay una obsesión brutal por las novedades; si no vende como churros en la semana de promoción que le dedica la editorial de turno, pasa al olvido en pos del siguiente título (siendo las propias editoriales las que se cargan sus productos invisibilizándolos).
Aún así, en la era de la inmediatez y del consumo de contenido vacío, creo que el formato físico está sobreviviendo bastante bien y, lo más importante, está demostrando ser compatible con el formato digital (cosa que no pasó ni con la música ni con el audiovisual).
De todas formas, ya los superventas son muy pocos y menos aún los escritores que consiguen sobrevivir sólo con su prosa. El mercado está muy diversificado (bien) y bueno, vivimos en España, país donde he llegado a escuchar cómo se mofaban de un chico por leer en el parque en vez de estar "jugando a darse empujones" como los demás... como si fuera un inadaptado o algo.