Hace 1 año | Por jelzimoñac a jotdown.es
Publicado hace 1 año por jelzimoñac a jotdown.es

En España la generación de los ochenta es la primera propiamente crecida con la televisión y tal vez la última que lo hizo jugando en la calle. Calle y televisión nunca fueron más hermanas. No hay una razón que necesariamente las vincule. Sí en cambio la prodigiosa realidad de aquel matrimonio. Así corríamos a proponer, compartir y escenificar cuanto veíamos en pantalla, transfiriéndolo felices a los patios, parques, callejuelas y arrabales que atestábamos. La caja, que entonces no era tonta, tenía su natural proyección en el barrio. Y esto lo

Comentarios

D

Como todo, hay que usar los aparatos electrodomésticos con mesura y sentido común. Echo de menos una advertencia sobre el peligro que encierran sus contenidos.

Ravenante

Pues depende. Si la tele la usas para ver pelis en plan momento familiar (y algún otro momento de emergencia con capítulos de algo al Chromecast) y no tienes ni un solo canal sintonizado, ni tienes Netflix ni demás mierdas, oh sorpresa: los niños no ven la tele y están deseando bajar a los columpios.

Es muy fácil echarle la culpa a la tele, cuando tú como padre no estás dispuesto de verdad a cambiar las cosas.

abnog

Recuerdo haber visto esa película (Child's Play) y me impactó mucho.