Los mamíferos somos unos sosos, unos mojigatos. Y eso que contamos con maravillas como el pene prensil de los tapires (digno de una categoría propia en el pornomundo) o la pacífica orgía permanente de los bonobos. Aun así, en global, nuestra vida sexual es mucho más animada que la de algunas especies de lagartos y serpientes, que se reproducen mediante una especie de clonación sin intervención sexual.
Comentarios
Eurocentrismo en estado puro. Hay otras culturas mucho más follarinas que la nuestra.
#1 ¿pero has leído el artículo o sólo el titular?
#2 No, un meneante de raza y solera no lee jamás antes de comentar