Publicado hace 4 años por ElLocoDelMolino a historiaespanaymundo.com

Si hay una época en la que la figura del bandolero toma relevancia esa es el siglo XIX, cuando principalmente en las zonas de Andalucía y Cataluña se echan al monte. El fenómeno del bandolerismo fue evolucionando y, de simples bandas de forajidos, pasaron a ser verdaderas organizaciones criminales similares a la llamada “mafia” o “cosa nostra”. Tenían unos jefes: los padrinos. Tres hechos a mediados del siglo XIX cambiaron el paisaje de las zonas rurales españolas. El primero de ellos fue la creación de la Guardia Civil en el año 1844.

Comentarios

casius_clavius

#2 Puede que tengas razón, y tiene sentido, aunque hay que tener en cuenta que las organizaciones mafiosas derivadas de redes jerárquicas campesinas las hay en otros sitios como Grecia, Turquía, Rusia, varios países de Asia Central, etc. Incluso diría que la Yakuza y las Triadas vienen de una base similar.

casius_clavius

Me da que los sicilianos, napolitanos y calabreses se las apañaban solitos para el crimen. En todas partes cuecen habas bandoleriles.

Q

#1 Da la casualidad que durante bastante tiempo estos territorios han sido parte de las posesiones de la corona española, con lo que no me extrañaría en absoluto que la mafia sea una herencia del legado español en Italia.

De hecho hay cosas que funcionan en esa zona por costumbrismo español, como por ejemplo la organización gremial, de la cual incluso se puede extraer una derivación hacia la mafia.

u

Muy interesante.

Solo indicar que en Cataluña el fenómeno es más propio de los siglos XVI y XVII, con figuras como el también mitificado Serrallonga, por ejemplo. Decir también que muchos de ellos o bien provenían de familias de pequeños aristócratas venidas a menos o bien trabajaban para estas familias. En cierta forma es una continuación de las guerras privadas feudales en un contexto donde estas ya no están tan bien vistas.

En el siglo XIX en Cataluña los que se echaron al monte fueron los carlistas, que aunque tuvieran puntos en común con los bandoleros de antaño son fenómenos diferentes.