La mujer no tuvo derecho al voto en Suiza hasta 1971. La cineasta Petra Volpe narra en esta película la historia de esta conquista a través de una ama de casa que despierta y se politiza.
Algunos temían que si se permitía el voto a las mujeres, el estado se convertiría en un ser débil, pusilánime, y emocional, incapaz de usar la lógica, los hechos y la razón.
Hoy, miles de políticos se ponen una medallita por recibir a unos centenares de inmigrantes, mientras legiones de femilocas campan a sus anchas acosando a nuestros jueces, y a todo aquel que se cruce en su camino. Los hombres se prenden fuego ante los juzgados. Los niños no nacen. El fracaso escolar y el paro juvenil están por las nubes, probablemente debido a la ausencia de un referente paterno fuerte. Las parejas no sobreviven ni dos asaltos sin acabar en divorcio, un divorcio que beneficia enormemente a las mujeres.
Al mismo tiempo, las culturas más tóxicas, podridas y retrógradas del mundo, penetran en nuestros países, e imponen sus formas. El estado les da paguitas e introduce su religión en las escuelas, la prensa tapa sus crímenes.
Hoy, decir que un crimen lo ha cometido un inmigrante es incitación al odio. Destacar lo ha cometido un guardia civil es motivo de aplauso. Meter en la misma categoría a un juez que a un criminal es motivo de aplauso.
Yo ya me planteo que puede, sólo puede, que quizás tuviesen razón.
Comentarios
http://gnula.nu/comedia/ver-the-divine-order-el-orden-divino-2017-online/
El tío de la foto está mirándole el culo mientras piensa que 'selafo'. Mierda de heteropatriarcado opresor
Algunos temían que si se permitía el voto a las mujeres, el estado se convertiría en un ser débil, pusilánime, y emocional, incapaz de usar la lógica, los hechos y la razón.
Hoy, miles de políticos se ponen una medallita por recibir a unos centenares de inmigrantes, mientras legiones de femilocas campan a sus anchas acosando a nuestros jueces, y a todo aquel que se cruce en su camino. Los hombres se prenden fuego ante los juzgados. Los niños no nacen. El fracaso escolar y el paro juvenil están por las nubes, probablemente debido a la ausencia de un referente paterno fuerte. Las parejas no sobreviven ni dos asaltos sin acabar en divorcio, un divorcio que beneficia enormemente a las mujeres.
Al mismo tiempo, las culturas más tóxicas, podridas y retrógradas del mundo, penetran en nuestros países, e imponen sus formas. El estado les da paguitas e introduce su religión en las escuelas, la prensa tapa sus crímenes.
Hoy, decir que un crimen lo ha cometido un inmigrante es incitación al odio. Destacar lo ha cometido un guardia civil es motivo de aplauso. Meter en la misma categoría a un juez que a un criminal es motivo de aplauso.
Yo ya me planteo que puede, sólo puede, que quizás tuviesen razón.