En estas semanas asistimos a un incipiente debate informado sobre la transición energética, uno de los pilares más relevantes de la anunciada Ley de Cambio Climático que el Congreso de los Diputados pidió hace ya siete años y con la que el (ex)presidente Mariano Rajoy se comprometió hace más de dos. Hay varios informes interesantes al respecto. Todos ellos coinciden en algo obvio: el sistema energético es 'sistema' y debe ser eficiente y libre de emisiones de gases de efecto invernadero en 2050. Hay que recuperar cuanto antes el tiempo perdido.
Comentarios
#0 Te veo muy entusiasmado con el "momento político"..te recuerdo que el primer proyecto de balance neto en España se quedó en el cajón con un gobierno del PSOE, siendo ministra una tal Elena Salgado. Me gustaría que el equivocado fuera yo, pero no son de fiar, se venden a cualquier puerta giratoria, y las eléctricas tienen muchísimo poder.
#1 Soy tan escéptico como tu. Tan solo trato de recordar todo lo que han dicho / prometido al respecto cuando estaban en la oposición.
Creo que va a ser una buena prueba de la credibilidad de este "nuevo" (?) PSOE para tener en cuenta en las próximas elecciones...
#2 Como ella misma dice; "Es la hora de la verdad"
Todo va a favor de la transición energética, en el sentido que se están abaratando de forma muy importante los costes. Es la energía solar y eólica las fuentes más económicas. El problema es toda la inversión en las centrales de carbón y nucleares como afrontarla. Pero resulta que ya no son rentables las centrales de carbón y nucleares. Ahora mismo en España estamos pagando unos precios eléctricos abusivos precisamente por tener un sistema eléctrico poco competitivo, es un oligopolio que se ha cebado de con las puertas giratorias. Se hace más necesaria que nunca está transición energética, porque no se puede esperar.
Facilitar decisiones coherentes por parte de consumidores y empresas debe ser la tarea principal de cualquier decisor público. Deberá orientar a través del marco regulatorio, presupuestario y fiscal las señales de valor y desvalor que mejor se compadezcan con el proyecto que se ha de impulsar. Y un proceso de cambio tan intenso en tan poco tiempo como el que requerimos exige anticipar de forma inteligente el modo en que acompañar los cambios. Por eso, no es de extrañar que Francia debata la incorporación de la lucha contra el cambio climático en su Constitución, del mismo modo que en Alemania se plantea la integración de un principio general de actuación en favor de la sostenibilidad, sin trasladar hipotecas a las generaciones futuras.
Hay directivas europeas que no cumplimos y por las que seremos sancionados pronto, así que ponerse ya manos a la obra podría reducir esas sanciones, que perjudican a todos los que vivimos en España, aunque nos hayan cortado la luz.