En las últimas semanas, los fabricantes de automóviles y otras empresas del sector automovilístico están retirando sus inversiones en vehículos eléctricos (VE), lo que incluye el despido de trabajadores en varios estados. Estas medidas se producen a raíz de la ley One Big Beautiful Bill Act, impulsada por los republicanos, que derogó los incentivos para que los consumidores compraran coches eléctricos. GM, en particular, tiene previsto despedir a 1200 trabajadores de su planta de Detroit y a otros 550 de su planta Ultium Cells en Ohio.