En una improvisada pista de baile delimitada por postes y cintas en la discoteca Florida Park de Madrid, Vicente Pizcueta, portavoz de la patronal España de Noche, trata de explicar cómo se podría bailar en un un local de ocio nocturno en tiempos de Covid. Una asistente le ayuda paseando por el recinto mientras Pizcueta trata de explicar cómo los clientes entrarían en la pista, bailarían un par de canciones y se marcharían, todo ello protegidos con mascarillas y manteniendo distancia de seguridad.
Comentarios
Yo voy a beber.
#2 yo iba al cuarto oscuro del arenas a... pedir fuego
#2 Y el 99% de los tíos. Todos vamos a beber y a ver si se tiene alguna oportunidad de hablar con alguna chica.
#5 "Hablar" XXXD.
#7 Joder, de follar ni hablamos. Eso era el unicornio rosa del salir de copas. Todos sabíamos de alguien que lo había hecho, pero nadie le conocía en persona.
#14
Fui muy pocas veces de discotecas, afortunadamente había alternativas más a mi gusto, eso sí, el "espíritu emprendedor" siempre estaba ahí, forjando el caracter como sólo se aprende con los fracasos... con decirte que entonces vivía en Euskadi, no me hables de "unicornios" porque allí no habia siquiera leyendas XXXD.
#15 Tinder hace que los chavales de hoy en día no se hayan forjado el carácter a base de "ostias" en la autoestima. Ahhh esos momentos de indecisión, ese momento de decisión, has visto la oportunidad, esa cobra perfectamente ejecutada delante de todos tus amigos y alguna novia de ellos... Ese sabor a fracaso pero con la dulzura de saber que por lo menos lo habías intentado... Todos esos días recordando fracasos entre colegas y cervezas. Todo se perdió, como lágrimas en la lluvia.
#16 Veo que en tu caso también forjaron un alma de poeta
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Los de ahora lo tienen todo hecho. No sé de qué tiempos serás tú. En aquellos tiempos, tener motivos para celebrar algún logro conllevaba inevitablemente una pena capital. Si, por lo que fuese había intercambio de teléfonos, los escalorfríos y sudores desatados en la sobremesa familiar de un domingo cuando sonaba el teléfono de la sala era inenarrable, no había esquina lo suficienemente alejada de la inquisitoriales miradas familiares, ni susurros que consiguiesen culminar su viaje a través de la línea telefónica que no escapasen a sus oídos.
Mucho después Barbol dijo aquello de "no hay término élfico, en lengua Ent o de los hombres para describir este horror", pero se quedó corto.
#2 cuando iba a una discoteca me preguntaba: " para que he venido?
#2 me too
A mi me parecía un coñazo la discoteca y lo de maquearse todavía más.
La mayoría de tíos íbamos a las discotecas para ligar.
Algunos han comentado que iban a beber. Yo ya entraba bebido, que salía barato consumir en el bar de la esquina. En la discoteca tomábamos la consumición mínima que estaba incluida con la entrada.
#11
acabas de recordarme mis años mozos
Si, bailar ... seguro.
En mi vida, hulio. He pisado más iglesias que pistas de baile, y eso que soy ateo desde que tengo uso de razón.
Las discotecas murieron a finales de los 90, principios de los 2000, hoy en día son indistinguibles se un lupanar.
No seremos los tíos. Creo que fue Goyo Jiménez en algún monólogo, quien dijo que los tíos no bailamos, que el tío que baila en una discoteca, es porque quiere follar. Y razón no le falta.
Pero que me cuentas, si las iglesias son raves en estado puro :