Cuando se habla de regulación la “corrección política” dispara su respuesta automática preguntando por los menores, ¿y quien piensa en los niños? Preguntaría algún personaje de ficción. A ello se puede responder, ¿y quien piensa en los padres de esos niños? Por más que se empeñen, sus hijos se convertirán en personas autónomas que deberán vivir y convivir en una sociedad cada vez más esquizofrénica y que demanda capacidades de razonamiento y conocimiento para no sucumbir a cualquiera de esas nuevas enfermedades mentales.
Comentarios
Si son drogas no será una línea roja, será blanca.
#1 Se refiere a las carreras de pinchazos en el el cañón de las venas
Lo que en el artículo se denomina "argumento de los jóvenes" nunca lo ha sido y nunca lo será.
«En último término, la obvia necesidad de proteger a la infancia y la adolescencia de maniobras desaprensivas nunca justificará la maniobra desaprensiva de tratar a toda la población como si fuese una guardería infantil.»
http://perso.wanadoo.es/jcuso/textos/savater3.htm
Escueto pero preciso.
Todos hemos hecho las cosas que nos han sido prohibidas, es un paradigma del ser humano.
Siempre he dicho que no querer verlo es de ser "muuuu tonto" pero el "muuuuu tonto" era yo ya que no veía la realidad.
Da más prohibir que regular y educar.