Hace 1 año | Por MrBorji a noudiari.es
Publicado hace 1 año por MrBorji a noudiari.es

Vivir en Ibiza constituye un privilegio porque, a pesar de la saturación y el agobio que se respira en los momentos álgidos de la temporada turística, vivimos rodeados de belleza y disfrutamos de unos paisajes que cortan la respiración. (...) Desde el punto de vista económico, sin embargo, residir en la isla, con un salario medio, se está convirtiendo en una quimera, salvo para quienes ya disponen de una infraestructura heredada de la generación anterior.

Karaskos

#1 Exacto.

MrBorji

#4 El paraíso es para los 3-4 que hacen el negocio (y reza que el dinero no se vaya de la isla). El resto, cada año más complicado todo. Y menos mal que han subido ligeramente los sueldos.

Penetrator

#1 Es que es un paraíso selectivo: sólo en caso de tener pasta.

a

#1 yo viví en Ibiza en 2007/09 y es un puto paraíso, si no llegas a fin de mes cosa normal también sigue siendo un paraíso porque los paisajes de la isla son gratis por suerte.
Cuando yo estuve allí la vivienda era cara pero no como ahora, lo que si era carísimo era la cesta de la compra.
La verdad que yo nunca he llegado tan justisimo, por decir que no llegada, a fin de mes y a la vez he estado tan feliz en un sitio
Ah se me olvidaba me encantaba el verano allí, pero más aún el invierno

ElPerroDeLosCinco

#1 Es un paraíso, pero unos pocos lo han convertido en un lugar inasequible para muchos. He pasado varias temporadas en Ibiza por motivos familiares y cada vez he conocido a menos gente de Ibiza. Ahora casi todo el mundo (turistas aparte) está de paso mientras le dure un trabajo que le permite seguir viviendo allí. Cuando encuentra otra cosa o pierde su trabajo en Ibiza, se marcha.

z

al que dispone de una infraestructura heredada o si cuando el precio de la vivienda era asequible compró en vez de alquilar porque se ve que el articulista es partidario del alquiler y cuando su plan le ha salido mal quiere hacer extensible su mala elección a todo el mundo.

Todo lo anterior sin dejar de dar la razón a quien pide un parque público de vivienda o al menos un tanto por ciento de VPO anual.

Hay muchas razones totalmente respetables y resonsables, para alquilar en vez de comprar, inestabilidad laboral, movilidad geográfica, insuficiencia de recursos, simple comodidad de vivir donde se quiere, etc. pero como contrapartida está que la subida de alquileres les deja contra las cuerdas, como está pasando desde que se reactivó, otra vez, el mercado inmobiliario.

bronco1890

#2 En otros sitios puede, pero lo de la vivienda en Ibiza ya es demencial, con pisos por encima de los 300.000 euros y pisos que se alquilan a 2000 euros.
Va camino de convertirse en una especie de parque temático, sin vida real aparte del turismo y es una pena.

Wintermutius

#5 Esos precios son lo normal en ciudades no tan grandes como Valencia, ...

MrBorji

#6 Pero en València y en otras ciudades grandes puedes ir a pueblos o ciudades cercanas y encontrar pisos mucho más baratos. En Ibiza no es posible.

Wintermutius

#7 Pues cuando algo no es posible, ..., todo claro. Ibiza dista mucho de ser un paraíso. Desde hace muchos años.

Noeschachi

#6 Los precios pueden ser altos en Valencia, pero por 2000€ de alquiler tienes un pisazo y no los zulos ibicencos

Wintermutius

#16 Por 2.000 € tienes un "piazo" piso en Cortes Valencianas. Eso sí, ..., pero por menos de 700 €, casi no encuentras nada en toda la ciudad, ...

Condenación

Vendieron la isla y se quedaron sin ella.

IkkiFenix

residir en la isla, con un salario medio, se está convirtiendo en una quimera, salvo para quienes ya disponen de una infraestructura heredada de la generación anterior.

Meritocracia

n

Las Baleares, las Canarias y la Costa del Sol. Tres litorales que se han malvendido a extranjeros para construir una economía de cartonpiedra que luce mucho y no soluciona nada. Cuantos más turistas van, más pobres se vuelven.

Pero parece que muchos se han tragado la pantomima de que todo eso es desarrollo y que está lloviendo. Cuatro gatos (que ni siquiera son de allí) haciéndose de oro mientras los autóctonos pagan la fiesta con trabajos precarios y alquileres que están años luz incluso de los buenos salarios locales.