#3 Así describiría la realidad, y lejos de una mano negra omnipresente que todo lo controla y manipula a su antojo y beneficio, lo que veo son infinidad de gilipolleces como tantas que hay en el lenguaje.
Tenemos una cultura machista, aceptémoslo, que yo me lleve alguna que otra hostia de mi padre pero jamas he usado la violencia con otro salvo en defensa propia para frenar una agresión.
¿Tu pegas a tus hijas? Pues yo procuro evitar la discriminación que perdura en el lenguaje, mientras acepto que la realidad es lo que ocurre mientras pensáis en el futuro.
Comentarios
Gilipollez absoluta.
#3 Así describiría la realidad, y lejos de una mano negra omnipresente que todo lo controla y manipula a su antojo y beneficio, lo que veo son infinidad de gilipolleces como tantas que hay en el lenguaje.
Tenemos una cultura machista, aceptémoslo, que yo me lleve alguna que otra hostia de mi padre pero jamas he usado la violencia con otro salvo en defensa propia para frenar una agresión.
¿Tu pegas a tus hijas? Pues yo procuro evitar la discriminación que perdura en el lenguaje, mientras acepto que la realidad es lo que ocurre mientras pensáis en el futuro.
Machista no sé, pero desde luego la ciudadanía entendería mejor lo que se hace ahí si se llamase "congreso de putadas".
Ahí, atajando los problemas reales de la sociedad...
si lo llaman Congreso de las Diputadas, también se quejarán porque contiene la palabra "puta"
Es un gran problema que hay que solucionar ya. Ya por lo menos hemos avanzado con los semáforos con mujeres.
La subnormalidad siempre se acaba imponiendo.
Referendum popular para cambiar el nombre
Debería llamarse Congresa de las diputadas.