Seis combatientes del PKK encarcelados en la ciudad turca de Diyarbakir escaparon construyendo una escalera con mangos, sábanas y una cuerda. Una posterior investigación en la cárcel ha permitido determinar que los prófugos habrían estado rompiendo palos de fregona a propósito para tener una excusa con la que pedir nuevos mangos regularmente. Así, sin que los carceleros reclamaran los inutilizados, con piezas de sábanas y una cuerda hecha con macramé, habrían conseguido armar la escalera que les permitió saltar el muro de siete metros.
Comentarios
Que poco estilo, deberían haber usado pasos de selfies.
Ahora nos echarán la culpa los turcos
#2 nos convertirán en su cabeza de turco
Hay que tener muchos cojones para subirte a una escalera de 7 metros hecha con palos de escoba.
#2 Están buscando un cabeza de turco. #3 Cabrón, sal de mi cabeza.
#4