#5 Lo de dejar pintarrajear las paredes de casa lo hicieron también conmigo y ya peino canas, no era nada común esa clase de permisividades en aquella época. Supongo que fue una de mis primeras victorias personales y que no me puedo quejar de los padres que tuve.
A mí me prohibían leer porque me leía hasta los prospectos, y consiguieron el efecto contrario, me quedaba ciega leyendo metida en un armario. Y eso y jugar a albañiles con el barro en el pueblo con piedras y una paleta sacada de dónde fuera horas y horas. A mí hija le dejábamos que pintara donde quisiera, es otra solución, cuando tenga 10 años pintas la casa o echas más gotelé.