Es por su música o por sus pelucones? Tiene el mismo mérito
#1 En realidad existen movimientos no controlados por el cerebro en sí, sino por los ganglios, que son agrupaciones de neuronas situadas fuera del Sistema Nervioso Central y que dan respuesta a conductas motoras como los reflejos, entran en funcionamiento en el reflejo de extensión, por ejemplo
¿Alguno ha llegado a leer la noticia?
Cito textualmente:
"continuó reclamando la cadena perpetua, sinónimo promedio en Dinamarca de 16 años de confinamiento.
#7 Es una cuestión de enfoque. Las terapias cognitivo-conductuales tratan la depresión desde el paradigma de la activación. Hacer actividades aunque no te apetezca, algo así como que tu estado de ánimo no te gobierne, sino que sea él el que "acabe cediendo". La tendencia es combinar terapia y medicación, aunque hay que distinguir entre depresión como rasgo y estado
Físicos encuentran la manera para hacer la caca de colores. Era la musiquilla que sonaba en mi cabeza mientras leía el titular
Si, lo he visto después de publicarla
Que grandes!
#15 ¿Estás asumiendo que a todos los que no se les deja entrar son malos vecinos? Lo único que digo es que cuando lo que se reivindica es un trato justo, y no privilegios, me parece una reivindicación legítima
#18 Que yo sepa ningún buen vecino tiene problemas , si tu quieres mezclar las cosas es cosa tuya
Cuánta bilis. El hecho de que se denuncie un comportamiento racista se usa como argumento ad hominen en vez de entenderse como un avance hacia la convivencia.. curioso
#6 Curioso no me parece y menos en un pais donde predomina la tolerancia entre buenos vecinos , luego estan los que dan por culo y pueden ser de cualquier especie solo que algunos van por familias ....y en estas andamos
#15 ¿Estás asumiendo que a todos los que no se les deja entrar son malos vecinos? Lo único que digo es que cuando lo que se reivindica es un trato justo, y no privilegios, me parece una reivindicación legítima
#18 Que yo sepa ningún buen vecino tiene problemas , si tu quieres mezclar las cosas es cosa tuya
#21 Los gitanos entre ellos se roban, secuestran y matan. Otra cosa es que nos enteremos, no son mucho de denunciar.
#6 Lo que pasa es que aquí se usa el término "racista" para cualquier cosa. A ver, estos bares, ¿dejan entrar a negros, indios, moros, chinos, etc?
Para mí alguien que no deja entrar en su negocio a un colectivo que estadísticamente les causa problemas no es racista si ese colectivo está definido por ser de una raza concreta.
#27 Es que hacer eso es ser racista, y si no tiene que ver con la raza es discriminación. Pero da igual, la carga negativa de esos términos existe por una razón de postureo cultural. De forma pragmática, en el día a día, todo el mundo discrimina cuando interactua con otra gente.
Yo soy racista y discrimino a las personas por sus características externas todos los días. Hay que decirlo más.
Leticia Dolera abrirá una para hombres. "Campodenabos" Island se va a llamar
Yo también lloraría su tengo que aguantar una canción de Maluma
¡Gracias a ti, homeopatía!
#13 sin querer jugar al abogado del diablo, en la base de la depresión está lo que Beck llamó triada cognitiva: una visión negativa del yo, del mundo y del futuro. Aquí no veo una visión negativa del mundo o del futuro. Tampoco me parece que haya victimización, porque esta es una tendencia a hacer una atribución externa de los eventos negativos, que mantiene como beneficio secundario la atención. En este caso con su enfermedad parece sentir incapaz de seguir adelante. Por eso me llama la atención.
#24 Convivir con una enfermedad mental, si ya es duro en la actualidad, mucho más debìa de serlo en la época de Virginia, cuando todavía había muchísima ignorancia y todo se resumía a que estabas loco.
Después de pasarte toda la vida luchando contra la enfermedad ya la conoces muy bien y tenìa que ser devastador ver aparecer los primeros síntomas de un brote sabiendo perfectamente el infierno que viene después. Virginia no se suicidó en los momentos más duros de una depresión. Lo hizo en un momento de lucidez, siendo consciente de que estaba enferma, simplemente porque estaba agotada de pasarse la vida enfrentándose a algo que no tenía cura y arrastrando a las personas que amaba en ello.
La nota de suicidio es una carta de amor estremecedora. Porque en ella no hay el victimismo de un suicida, sino agradecimiento y un intento de consuelo hacia alguien que la quería y que había sufrido y combatido la enfermedad con ella.
Un hombre nada corriente