Hace 4 años | Por --607544-- a eldiario.es
Publicado hace 4 años por --607544-- a eldiario.es

Este lunes en Alboraia (Valencia) un hombre de 48 años asesinaba a su pareja, una mujer de 28 años que se convertía en la víctima mortal número mil de la violencia de género. "Esta cifra en un país como España en el que la tasa de homicidios es baja habla de una violencia que es estructural e inherente a la desigualdad entre mujeres y hombres", afirma la presidenta de abogadas Themis, María Ángeles Jaime de Pablo. La cifra de mil asesinatos recoge solo los casos en los que un hombre ha matado a su pareja o expareja pero deja fuera otros.

Comentarios

D

#4 Siempre te quedara el África profunda o alguna dictadura del oriente medio...

Rorschach_

Antes de 2002 esto no pasaba.

Siete_de_picas

#2 Antes de 2002 había mujeres muy torpes. Sin ir más lejos, una vecina de mis padres, la pobre mujer, siempre se estaba dando con la puerta del mueble de la cocina o cayéndose por las escaleras. Eso sí, fue morirse el marido y no volver a caerse por las escaleras nunca más.

D

Y digo yo:


Si el buenismo y la corrección política consideran que este dato les da licencia para crear una ley de violencia de género que presupone que la violencia de género siempre es violencia del hombre sobre la mujer y que endurece la acción legal y penal sobre el hombre por la violencia de género, y que además el dato les da licencia también para fantasear y aducir que esta ley políticamente incorrecta y sexista en realidad puede considerarse políticamente correcta y no-sexista porque no establece taxativamente que todos los hombres sean violentos,

¿No queda entonces, exactamente por el mismo razonamiento, validado o validable también como políticamente correcto y no-racista cualquier endurecimiento de la acción legal, penal y policial sobre cualquier etnia si esta etnia es la que comete la delincuencia en la inmensa mayoría estadística de los casos de "delincuencia de etnia"? Pues con un endurecimiento legal de este tipo tampoco se estaría estableciendo taxativamente que todos los miembros de esa etnia sean unos delincuentes.

Es decir, formulando la pregunta con otras palabras muchos más sencillas:

¿No está el buenismo dando la razón al malismo cuando el buenismo se permite dar las estadísticas por válidas para cometer un prejuicio, una generalización, una incorrección política y un sexismo tan grande como la ley de violencia de género?

¿No está el buenismo demostrando que el buenismo y la corrección política no se los cree ni él?

Si las estadísticas parecen decir que el género masculino es propenso a cometer violencia sobre el género femenino, y el buenismo se deja llevar por esas apariencias estadísticas para sacar una ley tan sexista y políticamente incorrecta como la ley de violencia género, y encima decir que no es sexismo...

¿No está entonces el buenismo dando la razón al malismo y legitimando a los malistas que se quieren dejar llevar también por las estadísticas relativas a la comisión de delitos por ciertas etnias para reforzar la acción legal y policial en torno a esas etnias?

¿O solo el buenismo tiene la patente para ejercer la incorrección política de forma perdonable?

En definitiva: ¿no es todo esto de la violencia machista y la ley de violencia machista defendida por el buenismo la más clara demostración de que el buenismo y la corrección política no se los cree ni el buenismo mismo, y el primero en basarse en las estadísticas y las generalizaciones si hace falta es el buenismo?

¿No desacredita la ley de violencia machista al buenismo, por el profundo sexismo e incorrección política de esa ley que el buenismo considera admisible, no-sexista y políticamente correcta sobre la base de generalizaciones estadísticas?

D

#1 Pero esos fundamentos los firmo el buenista de Rajoy, y no otro en el convenio de Estambul, como te quedas ahora?

D

#3 La ley de violencia de género consiste pura y simplemente en prestar la debida atención y crédito a las estadísticas. Pero es que esto de prestar la debida atención y crédito a las estadísticas es exactamente el pecado que el buenismo atribuye y denuncia de los malistas como M. Rajoy. Para el buenismo cualquier estadística que muestre que la delincuencia es desmesuradamente alta en una etnia es una incorrección política criminal imperdonable. ¿Cómo que entonces al buenismo de repente le deja de parecer una incorrección política criminal imperdonable una estadística que muestre que la violencia de género es desmesuradamente alta en el sexo masculino?

A la hora de la verdad, el buenismo y el desprecio por las estadísticas no se los cree ni el buenismo mismo.