A GRACILIANO RAMOS, escritor brasileño, autor de una novela que debería figurar en el Antiguo Testamento, la titulada Vidas secas, lo detuvieron varias veces cuando era un joven periodista. A cada poco, lo prendían y le daban tremenda paliza. Él preguntaba por qué, y le gritaban: “¡Por comunista, cabrón!”. Pero Graciliano Ramos no era comunista ni cabrón. Hasta que llegó un día, más que maltrecho por la paliza, en que decidió hacerse comunista. Pensó: “Si me están martirizando por ser comunista, por lo menos tener el carné de comunista”.
Comentarios
Copia/plagio: https://elpais.com/elpais/2019/02/11/eps/1549885481_150786.html
¿y? ELPAIS es AEDE y redilosofia.es no.
Personalmente me ha gustado mucho la presentación del deconstructivismo
@anglada, hablan de ti y de tu elnacional.cat.