Hace 12 años | Por CockSparrer a elcomercio.es
Publicado hace 12 años por CockSparrer a elcomercio.es

Marifé Antuña vive enfundada en una mascarilla porque sufre sensibilidad química ambiental, una enfermedad de la que solo se conocen dos casos en Asturias. Ella lucha para se reconozca su dolencia. Nada de perfumes, ni desodorantes o cremas en el cuerpo. Tampoco ropa que haya sido lavada con suavizante o que tan siquiera huela a detergente. Estos son algunos de los requisitos que el equipo de El Comercio tuvo que cumplir para poder hablar en persona con Marifé, una de las dos asturianas diagnosticada con sensibilidad química ambiental

Comentarios

D

Leemos en el artículo:
“…está aislando otro de los espacios para evitar las ondas eléctricas…” ¿Ondas?
¿Y el vinagre y el bicarbonato no le afectan…? Ah, es que son productos “naturales”…
Raro.