Hasta 70.000 niños chinos son secuestrados y vendidos cada año en China y muchos acaban en países occidentales. Aunque apenas se conoce fuera de China, el tráfico de niños es un epidemia en la república popular. De acuerdo con la agencia Xinhua, mas de 54.000 niños han sido rescatados y 11.000 traficantes detenidos desde 2009.