Todos estos estudiantes, déjenme que insista en ello, han sido declarados aptos para realizar estudios universitarios de economía. Incluidos los que han suspendido este test. Lo cual me plantea algunas preguntas... ¿Cómo es posible que esos estudiantes hayan llegado hasta aquí? ¿Qué les espera? ¿Quién se va a responsabilizar de estos fracasos?
#5 En los tests se pone puntuación negativa por las respuestas incorrectas, porque si no, simplemente respondiendo al tuntún, tendrías fácilmente 1-2 puntitos sobre 10, aunque el examen estuviera en mandarín. De hecho, el cuánto restan las preguntas incorrectas depende de cuántas posibles opciones hay. Por ejemplo, con cuatro posibles respuestas (y por tanto un 25% de acertar), se resta 0,33 en caso de respuesta incorrecta. Así, suponiendo que hay 100 preguntas, aciertas el 25% y fallas el resto, la nota final de un examen a boleo sería de 25*1-75*0,33=0 patatero.
Por eso, en esos casos hay que afinar la estrategia. Por ejemplo, sólo responder al tuntún si podemos descartar al menos una de las opciones por absurda. En ese caso, la probabilidad de acertar al tuntún es del 33% (1 entre 3), y la nota esperada respondiendo a boleo, suponiendo que podemos descartar una opción en todas, sería de 33*1-66*0,33=1,1. Más de un punto sin saber nada del tema, no está mal, y en caso de ir justitos y rondar el 4 puede suponer la diferencia entre aprobar o suspender.
#9 En mi caso, con 5 alternativas de respuesta: una correcta=+1 punto. Si marca alguna incorrecta: -0,25 puntos. Así la esperanza matemática de cada pregunta respondiendo al azar es 0.
#18 Sí, esa es la forma de evitar que te contesten a boleo las preguntas que no se saben. La gracia es aprovechar cuando, aunque no sepamos la respuesta a una pregunta, sí sabemos descartar alguna de las respuestas (muchas veces ponen alguna de relleno que es claramente absurda).
Resumiendo mucho, la mejor estrategia es, primero, responder todas las preguntas de las que sepamos la respuesta. Y, después, de las que no sepamos, responder al tuntún aquellas para las que podamos descartar alguna respuesta, y dejar en blanco las que no podamos. En realidad tampoco tiene por qué ser al tuntún, se pueden aplicar otros criterios "pachangueros" pero que suelen funcionar bastante bien, como asumir que la respuesta más larga tiene más números de ser correcta que las cortas. También hay contradicciones lógicas que se pueden aprovechar, como por ejemplo que hayan dos respuestas que sean mutuamente excluyentes, y luego una adicional del tipo "todas las demás respuestas son correctas/falsas". Al haber dos respuestas que no pueden ser correctas o falsas a la vez, esa última respuesta es literalmente imposible que suceda, con lo que ya hemos descartado una y podemos responder a boleo con la estadística de nuestra parte.
Y, por supuesto, en un examen tipo test en el que las preguntas erróneas no resten, jamás dejar una pregunta en blanco. Cuando el tipo test es así, es que el que lo ha diseñado no sabe gran cosa de matemáticas, porque básicamente está regalando 2,5 puntos a todos
Pequeña clave a mi parecer, que nunca alcancé a entender, que quitemos puntos a un alumno por no contestar una pregunta. Es decir, parece ser que lo lógico según ciertos sistemas de evaluación es: "si no sabes qué hacer, juégatela". Yo creo que es mejor saber cuando hay que estar callado a decir (o hacer) una barbaridad.
#2 En los exámenes tipo test hay estrategias más favorables que otras aún teniendo pocos conocimientos sobre la materia que se evalúa, sospecho que lo de la puntuación negativa tiene más que ver con desmontar ciertas estrategias de esas que con el trasfondo interpretativo al que aludes.
#16 Eso sería impugnable, porque es manifiestamente injusto. Supón que haces un examen de 10 preguntas. Respondiendo 7 bien y 3 mal estarías suspendido, lo cual es bastante absurdo.
El que no quiera ver que el nivel de los estudiantes actuales es mucho peor que el que tenían antiguamente, tanto en conocimientos como en razonamiento es que está ciego.
#12 Pero es que se está hablando de potenciar el FP como si eso fuera la panacea, y no lo és. El que es un vago es un vago, en el FP y en la universidad, y el problema es que los estudiantes ahora son vagos y están pagados de sí mismos.
Si coges a un adolescente, al que por edad no le apetece nada estudiar, y le dejas pasar con poco esfuerzo para no frustrarle, lo que consigues es que no trabaje, y después cuando llegue a cualquier sitio donde le pidan algo de esfuerzo, ya sea la FP, la universidad, el trabajo, el ejército, la búsqueda de vivienda... vamos, que llegue a la vida adulta, cuando se tenga que esforzar no lo va a hacer y se va a quejar porque la asignatura es difícil, no dirige un departamento a los 25, tiene que madrugar o los alquileres en el centro junto a un parque son caros. ¡Pero si cada año alguien se queja de las pruebas para ser bombero o policía!
#15 Veamos el Y en los progenitores, y la falta de conciliación, y las ratios en clase, y la falta de medios...
- progenitores : esto puede ser, porque ahora mimamos a los críos, que me viene a dar la razón, pero lo hacemos porque los pedagogos nos dicen que no podemos castigar a los críos o darles un soplamocos (de hecho, es delito) porque mina su autoestima (es preferible que la hostia se la dé la vida).
- falta de conciliación : o estás en un sitio o estás en otro, no hay más. Si el crío entra a las 9, sale a las 12:45, vuelve a entrar a las 15:00 y sale a las 17:00 (el horario que tenía mi hijo) eso no hay empresa que lo concilie. Y dura mientras dura la primaria. Y después viene la secundaria, que es de 8:00 a 14:00, así que lo mismo. Si queremos que los padres estén pegados a los críos pendiendes de ellos como hace 40 años, pues uno de los padres tiene que dejar de trabajar como pasaba hace 40 años.
- ratios de clase : eso no creo que sea, porque yo (y todos los que estudiamos EGB) estudié en clases de 40 alumnos, en la universidad era como de 200 (al principio de curso, después la gente se raja) y ahora mismo en España los ratios andan como en cualquier otro país de los que tienen una educación estupenda. O son más bajos.
- falta de medios : eso al final es "más dinero para el profesor" o "menos trabajo para el profesor porque tiene tres ayudantes", porque ahora cualquier escuela tiene unos medios que hace 20 años no tenían ni en las salas de reuniones de la NASA.
El último punto es interesante, porque si metes en una clase de 25 niños a 5 que hablan 5 idiomas diferentes y 2 autis... niños con un trastorno en el espectro autista, necesitas 7 profesores auxiliares, claro, y si no están te puedes quejar de falta de medios, pero es que a lo mejor lo que había que hacer es no poner a esos 7 niños ahí sino tratarlos separados en otro colegio hasta que los 5 cogen nivel (de idioma) para ir a la clase de los demás (lo de los autistas es una pelea perdida) y ser uno más cuando realmente son uno más.
Es fácil quejarse de falta de medios porque al final siempre cae algo para la huchaca, pero es que tal vez el problema sea de organización o de no haber clavado en unas picas la cabeza de un par de pedagogos para ejemplo de los demás.
Eso no lo afirmo tan alegremente. Pero que con tal de limpiarse las estadísticas, se está dando patada a seguir a un montón de gente que no sabe hacer la o con un canuto...
Un aspecto que no considera el primo (sin acritud) del artículo es la alternativa que tienen los estudiantes que no van a la universidad, y las perspectivas vitales asociadas a no coger esa vía. Con una formación profesional más potente, digna y modernizada igual mejoraría la cosa.
#11 Tontos no son ni unos ni otros, es una cuestión de motivación, y en el caso de la FP pesa mucho el estigma que arrastra desde los 80. Que más que quitárselo, lo que está pasando es que lo está arrastrando también a la universidad...
El test se les hace a estudiantes de empresariales. Muchas matemáticas no van a saber.
Se han metido ahí para ganar dinero, no para hacer teoría de números.
El problema sería si esas respuestas las dieran en la facultad de física
#21 Decir que todos los números naturales son primos es algo que nadie con un graduado de la ESO debería decir, me da igual que luego haya tirado por empresariales o trabaje en el Mercadona.
La clave no está en la educación sino en la sociedad en su conjunto que ahora es mucho menos exigente y más permisiva que hace 20 o 30 años. Las pruebas de selectividad no son inmunes. Las Universidades necesitan al alumnado y sus matrículas así que muchas diseñan unas pruebas muy fáciles (y con diferencias entre ellas muy curiosas e interesantes). A esto añadamos que para superar la EBAU, la nota de las pruebas cuenta sólo un 40%, que el resto es la media del Bachillerato, que éste se puede titular con una suspensa (en realidad más porque pocos profesores quieren el marrón de hacer repetir a un chico con 2 o 3), que en las materias del Bachillerato hay marías con las que se puede subir la nota (Religión, sin ir más lejos)...
Como dice el articulista esta situación no se da en Medicina ni en Biotecnología, con draconianos límites de acceso. Yo me alegro de eso cuando voy al médico pero el maestro de mis hijos no me genera la misma confianza.
En realidad así es la democracia. Cuando el PP instauró las reválidas (como esa italiana de la que habla el artículo), la presión política y social impidió ponerlas en marcha. El efecto de esa causa es que algunos padres cuyos hijos son responsables, trabajadoes y autoexigentes, prefieren tenerlos en colegios privados, si pueden pagarlos, donde esperan obtener lo que creen que no les da la pública. La izquiera ha conseguido lo contrario de lo que pretendía, creo.
Comentarios
El famoso teorema gitano.
#3 Eso ha tenido gracia
#3
Ni las matemáticas se libran de la endogamia.
#5 En los tests se pone puntuación negativa por las respuestas incorrectas, porque si no, simplemente respondiendo al tuntún, tendrías fácilmente 1-2 puntitos sobre 10, aunque el examen estuviera en mandarín. De hecho, el cuánto restan las preguntas incorrectas depende de cuántas posibles opciones hay. Por ejemplo, con cuatro posibles respuestas (y por tanto un 25% de acertar), se resta 0,33 en caso de respuesta incorrecta. Así, suponiendo que hay 100 preguntas, aciertas el 25% y fallas el resto, la nota final de un examen a boleo sería de 25*1-75*0,33=0 patatero.
Por eso, en esos casos hay que afinar la estrategia. Por ejemplo, sólo responder al tuntún si podemos descartar al menos una de las opciones por absurda. En ese caso, la probabilidad de acertar al tuntún es del 33% (1 entre 3), y la nota esperada respondiendo a boleo, suponiendo que podemos descartar una opción en todas, sería de 33*1-66*0,33=1,1. Más de un punto sin saber nada del tema, no está mal, y en caso de ir justitos y rondar el 4 puede suponer la diferencia entre aprobar o suspender.
#9 En mi caso, con 5 alternativas de respuesta: una correcta=+1 punto. Si marca alguna incorrecta: -0,25 puntos. Así la esperanza matemática de cada pregunta respondiendo al azar es 0.
#18 Sí, esa es la forma de evitar que te contesten a boleo las preguntas que no se saben. La gracia es aprovechar cuando, aunque no sepamos la respuesta a una pregunta, sí sabemos descartar alguna de las respuestas (muchas veces ponen alguna de relleno que es claramente absurda).
Resumiendo mucho, la mejor estrategia es, primero, responder todas las preguntas de las que sepamos la respuesta. Y, después, de las que no sepamos, responder al tuntún aquellas para las que podamos descartar alguna respuesta, y dejar en blanco las que no podamos. En realidad tampoco tiene por qué ser al tuntún, se pueden aplicar otros criterios "pachangueros" pero que suelen funcionar bastante bien, como asumir que la respuesta más larga tiene más números de ser correcta que las cortas. También hay contradicciones lógicas que se pueden aprovechar, como por ejemplo que hayan dos respuestas que sean mutuamente excluyentes, y luego una adicional del tipo "todas las demás respuestas son correctas/falsas". Al haber dos respuestas que no pueden ser correctas o falsas a la vez, esa última respuesta es literalmente imposible que suceda, con lo que ya hemos descartado una y podemos responder a boleo con la estadística de nuestra parte.
Y, por supuesto, en un examen tipo test en el que las preguntas erróneas no resten, jamás dejar una pregunta en blanco. Cuando el tipo test es así, es que el que lo ha diseñado no sabe gran cosa de matemáticas, porque básicamente está regalando 2,5 puntos a todos
Pequeña clave a mi parecer, que nunca alcancé a entender, que quitemos puntos a un alumno por no contestar una pregunta. Es decir, parece ser que lo lógico según ciertos sistemas de evaluación es: "si no sabes qué hacer, juégatela". Yo creo que es mejor saber cuando hay que estar callado a decir (o hacer) una barbaridad.
#2 En los exámenes tipo test hay estrategias más favorables que otras aún teniendo pocos conocimientos sobre la materia que se evalúa, sospecho que lo de la puntuación negativa tiene más que ver con desmontar ciertas estrategias de esas que con el trasfondo interpretativo al que aludes.
#2 Yo tenía un profesor que quitaba dos aciertos por cada fallo. Con eso, la idea de jugarsela perdía interés.
#16 Eso sería impugnable, porque es manifiestamente injusto. Supón que haces un examen de 10 preguntas. Respondiendo 7 bien y 3 mal estarías suspendido, lo cual es bastante absurdo.
El que no quiera ver que el nivel de los estudiantes actuales es mucho peor que el que tenían antiguamente, tanto en conocimientos como en razonamiento es que está ciego.
#6 también hay que valorar la posibilidad de que sea estudiante en la actualidad o lo haya sido hace poco.
#12 Pero es que se está hablando de potenciar el FP como si eso fuera la panacea, y no lo és. El que es un vago es un vago, en el FP y en la universidad, y el problema es que los estudiantes ahora son vagos y están pagados de sí mismos.
Si coges a un adolescente, al que por edad no le apetece nada estudiar, y le dejas pasar con poco esfuerzo para no frustrarle, lo que consigues es que no trabaje, y después cuando llegue a cualquier sitio donde le pidan algo de esfuerzo, ya sea la FP, la universidad, el trabajo, el ejército, la búsqueda de vivienda... vamos, que llegue a la vida adulta, cuando se tenga que esforzar no lo va a hacer y se va a quejar porque la asignatura es difícil, no dirige un departamento a los 25, tiene que madrugar o los alquileres en el centro junto a un parque son caros. ¡Pero si cada año alguien se queja de las pruebas para ser bombero o policía!
El problema está en primaria y en los pedagogos.
#13 El problema está en primaria y en los pedagogos.
Y en los progenitores, y la falta de conciliación, y las ratios en clase, y la falta de medios...
#15 Veamos el Y en los progenitores, y la falta de conciliación, y las ratios en clase, y la falta de medios...
- progenitores : esto puede ser, porque ahora mimamos a los críos, que me viene a dar la razón, pero lo hacemos porque los pedagogos nos dicen que no podemos castigar a los críos o darles un soplamocos (de hecho, es delito) porque mina su autoestima (es preferible que la hostia se la dé la vida).
- falta de conciliación : o estás en un sitio o estás en otro, no hay más. Si el crío entra a las 9, sale a las 12:45, vuelve a entrar a las 15:00 y sale a las 17:00 (el horario que tenía mi hijo) eso no hay empresa que lo concilie. Y dura mientras dura la primaria. Y después viene la secundaria, que es de 8:00 a 14:00, así que lo mismo. Si queremos que los padres estén pegados a los críos pendiendes de ellos como hace 40 años, pues uno de los padres tiene que dejar de trabajar como pasaba hace 40 años.
- ratios de clase : eso no creo que sea, porque yo (y todos los que estudiamos EGB) estudié en clases de 40 alumnos, en la universidad era como de 200 (al principio de curso, después la gente se raja) y ahora mismo en España los ratios andan como en cualquier otro país de los que tienen una educación estupenda. O son más bajos.
- falta de medios : eso al final es "más dinero para el profesor" o "menos trabajo para el profesor porque tiene tres ayudantes", porque ahora cualquier escuela tiene unos medios que hace 20 años no tenían ni en las salas de reuniones de la NASA.
El último punto es interesante, porque si metes en una clase de 25 niños a 5 que hablan 5 idiomas diferentes y 2 autis... niños con un trastorno en el espectro autista, necesitas 7 profesores auxiliares, claro, y si no están te puedes quejar de falta de medios, pero es que a lo mejor lo que había que hacer es no poner a esos 7 niños ahí sino tratarlos separados en otro colegio hasta que los 5 cogen nivel (de idioma) para ir a la clase de los demás (lo de los autistas es una pelea perdida) y ser uno más cuando realmente son uno más.
Es fácil quejarse de falta de medios porque al final siempre cae algo para la huchaca, pero es que tal vez el problema sea de organización o de no haber clavado en unas picas la cabeza de un par de pedagogos para ejemplo de los demás.
#13 y están pagados de sí mismos.
Eso no lo afirmo tan alegremente. Pero que con tal de limpiarse las estadísticas, se está dando patada a seguir a un montón de gente que no sabe hacer la o con un canuto...
Y los número artificiales son chinos...
Un aspecto que no considera el primo (sin acritud) del artículo es la alternativa que tienen los estudiantes que no van a la universidad, y las perspectivas vitales asociadas a no coger esa vía. Con una formación profesional más potente, digna y modernizada igual mejoraría la cosa.
#8 con una FP más potente también habría que estudiar y saber que los pares no son primos (el 2 sí). Los de FP no son tontos.
#11 Tontos no son ni unos ni otros, es una cuestión de motivación, y en el caso de la FP pesa mucho el estigma que arrastra desde los 80. Que más que quitárselo, lo que está pasando es que lo está arrastrando también a la universidad...
El test se les hace a estudiantes de empresariales. Muchas matemáticas no van a saber.
Se han metido ahí para ganar dinero, no para hacer teoría de números.
El problema sería si esas respuestas las dieran en la facultad de física
#21 Decir que todos los números naturales son primos es algo que nadie con un graduado de la ESO debería decir, me da igual que luego haya tirado por empresariales o trabaje en el Mercadona.
La clave no está en la educación sino en la sociedad en su conjunto que ahora es mucho menos exigente y más permisiva que hace 20 o 30 años. Las pruebas de selectividad no son inmunes. Las Universidades necesitan al alumnado y sus matrículas así que muchas diseñan unas pruebas muy fáciles (y con diferencias entre ellas muy curiosas e interesantes). A esto añadamos que para superar la EBAU, la nota de las pruebas cuenta sólo un 40%, que el resto es la media del Bachillerato, que éste se puede titular con una suspensa (en realidad más porque pocos profesores quieren el marrón de hacer repetir a un chico con 2 o 3), que en las materias del Bachillerato hay marías con las que se puede subir la nota (Religión, sin ir más lejos)...
Como dice el articulista esta situación no se da en Medicina ni en Biotecnología, con draconianos límites de acceso. Yo me alegro de eso cuando voy al médico pero el maestro de mis hijos no me genera la misma confianza.
En realidad así es la democracia. Cuando el PP instauró las reválidas (como esa italiana de la que habla el artículo), la presión política y social impidió ponerlas en marcha. El efecto de esa causa es que algunos padres cuyos hijos son responsables, trabajadoes y autoexigentes, prefieren tenerlos en colegios privados, si pueden pagarlos, donde esperan obtener lo que creen que no les da la pública. La izquiera ha conseguido lo contrario de lo que pretendía, creo.