El impulso que recibió el skate a partir de mediados de la década de los 80, se ha asociado tradicionalmente a dos motivos: ver a Marty McFly patinando con su tabla en la película "Regreso al futuro" (1985); y al gran éxito que obtuvo "Skate or Die!", uno de los primeros videojuegos sobre skateboarding. Con un estilo de juego bastante libre donde el jugador se mueve con su monopatín por un vecindario para sumar puntos utilizando rampas y haciendo acrobacias, la recreativa gozó de relativo éxito en los salones recreativos de los 80.
Comentarios
Y la peli Al Filo del Abismo.
#2 buah, mitiquisima.
#2 Yo recuerdo también "Trashin" y aquellas peleas con los daggers y donde aparecen unos jovencitos "Guindillas rojas picantes"
Tony hawk pro skater.
#1 Nope, es del 91.
#8 sipe, del videojuego de la noticia ni había oído hablar, sin embargo en qué yo cito obligó a muchas ciudades a hacer skateparks para controlar un poco la cantidad de gente que empezó a andar en skate.
#11 Lo sé lo sé, no es mi terreno pero fue en el tuyo del que me acordé, miré y por fecha no coincide. Leches, ni siquiera sabía que en los ochenta había máquinas recreativas con estos juegos.
pauldurden
cc
De la versión de 720 degrees, versión Amstrad, recuerdo el jodido enjambre de abejas que te perseguía mientras conseguías dinero para meterte en las pruebas.
Pues este juego no me suena, pero la de horas que metí con todos los Tony Hawk! Molaba ver la progresión de unas versiones a otras. Llegó la opción de hacer manual, luego la opcion de continuar el truco cuando aterrizabas en un pipe... y los specials estaban cada vez más currados, hasta el absurdo.
A mí me gustaba más el 720º. Le eché muchas horas cuando era joven...
#3 Joder amiju, somos de la misma quinta me parece
Yo era más del Paperboy, bufff eso era a finales de los 70 creo.
#4 de 1984, te falla la memoria abuelo
#6 mucha droja en el Colacao amijo
La película que nos marcó a los que fuimos skaters en Madrid, en la plaza de Colón, fue Thrashin, que llegó directa al videoclub. No la he vuelto a ver desde entonces, pero me encantó. Insólita macarrada, era una suerte de Romeo y Julieta , con una secuencia de descenso con el ahora ínclito Josh Brolin, quien ya se había curtido en los descensos peligrosos en Los Goonies. Cierto que Al filo del abismo contaba con la participación de Tony Hawk, pero la trama detectivesca no me interesaba nada. Thrashin tal vez no fue mejor película, pero, qué cojones, me animó mucho.