Hace 3 años | Por Stiller a elconfidencial.com
Publicado hace 3 años por Stiller a elconfidencial.com

De la cesión a la venta. La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha vendido al Ayuntamiento de Madrid más de un centenar de viviendas —108 unidades—. Se trata de la mayor operación sobre pisos sociales aprobada jamás entre la entidad que preside Jaime Echegoyen y una Administración. Ambas partes han formalizado ya la venta de 16 unidades y está previsto que en las próximas semanas se complete la compraventa de las otras 92. Desde 2013, Sareb ha firmado convenios con 12 CCAA y 22 ayuntamientos.

Comentarios

Stiller

El titular suena muy bonito (más vivienda social, yupi), pero esto es básicamente el banco malo (Sareb) revendiendo a las instituciones públicas los mismos pisos de los bancos que fueron rescatados con dinero público.

Es decir, estamos comprando vivienda (¡que era de los bancos a los que ya rescatamos!) con Sareb como intermediario sacando beneficios.

Cojonudo, ¿verdad?

https://www.lainformacion.com/economia-negocios-y-finanzas/que-es-como-funciona-sareb-banco-malo-espana/6506192/

manuelpepito

#1 Pues verás cuando se la vendan a cualquier fondo buitre perdiendole pasta.

tiopio

#2 Al del hijo de Aznar, que ya tiene experiencia.

k

#1 y en unos años se venderan a algun fondo buitre a precio puta.
Grandes patriotas, grandes gestores

c

#1 Lo que viene a ser volver a pagar lo que ya has pagado.

D

Esas viviendas ya las hemos pagado dos veces entonces: sareb y Ayuntamiento.
El plan del banco malo era usar la sareb, para que con dinero de todos, se mantuviera artificialmente alto el precio de los pisos.
Que lo tenga en cuenta el españolito que no puede pagarse un piso: es que no puedes acceder a él, no que no haya pisos o no los hayas pagado con tus impuestos.

D

Y estos, mis queridos niños, son los liberales de verdad que siempre se quejan de que los liberales ficticios son realmente conservadores disfrazados, mientras mira la bolita mira la bolita míra la bolita... OPS, ya tengo otra cartera.

¿Demasiado sutil quizás?