Hace 10 años | Por nubepalleiro a elpais.com
Publicado hace 10 años por nubepalleiro a elpais.com

La reforma que se plantea, aun sin concretar, supone un grave retroceso. Ignora los dictámenes científicos sobre el embrión temprano —inviable de manera independiente—, rechaza una ley vigente que es más garantista con el feto y aporta mayor seguridad jurídica que la de 1985, y supone un ataque a la autonomía de las mujeres y a la capacidad de decisión sobre su cuerpo. La posibilidad de que la norma suprima o limite severamente el supuesto de malformaciones graves supone una aberración moral, denunciada de forma incansable por médicos

Comentarios

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Si yo fuera una mujer, tendría muy claro que nadie, absolutamente nadie, decidiría por mí qué hacer con mi cuerpo. El fundamentalismo religioso que subyace en la decisión del ministro Gallardón añade un elemento más de desasosiego y mácula de la imagen internacional de España. Una imagen no suficientemente deteriorada, por lo visto, que los del PP se empeñan en demostrar que todavía son capaces de empeorar más.

Sidku

¿Regusto? Destilan ultra-pus.

C

tienen miedo de que les falte mano de obra barata para explotar???pq los que tiene dinero seguiran abortado en otro pais como antes

d

Es normal que estos fascistas, prohíban el aborto incluso en caso de malformación. No veis que si no ellos no hubieran nacido, y su estirpe tampoco podrían nacer...