Hace 10 años | Por sleep_timer a yorokobu.es
Publicado hace 10 años por sleep_timer a yorokobu.es

Cuando Deckard vio morir a Roy Batty ya tenía claro lo que iba a hacer. Decidió desobedecer la orden de sus superiores y junto a Rachael huyó del país. Había oído hablar de un lugar donde el sol aún calentaba y solo llovía cuando tenía que llover. Su nave tenía autonomía de sobra para cruzar el charco, así que en unas horas llegaron a España. El navegador les llevó hasta el aeropuerto de Castellón, un lugar inhóspito y en ruinas que jamás vio aterrizar un avión. Un paisano que estaba por allí paseando a su perro ...