Hace 17 años | Por tarkovsky a cubavision.cubaweb.cu
Publicado hace 17 años por tarkovsky a cubavision.cubaweb.cu

Votaron en contra Estados Unidos, Israel, y las Islas Palau y Marshall. La abstención correspondió a Micronesia

Comentarios

Gotrek

¿La ONU? ¿y eso qué es? ¿para qué sirve?

reygecko

Estamos con el viejo problema: ¿quién le pone el cascabel al gato?

USA hacen lo que quieren, lo llevan haciendo demasiado tiempo para convencerles ahora de que deben dialogar y consensuar sus actos. Si al menos sirviese para acabar con una dictadura trasnochada, quizá alguien pudiese sostener la utilidad del embargo a Cuba, pero me temo que a los únicos que hace daño es a los pobres cubanos, que ya tienen demasiadas desgracias como para añadirles otra.

C

Pues vale... pues que la condenen, ¿y?... ¿va a pasar algo?

turko

Intervención en la Asamblea de la ONU del ministro de Relaciones Exteriores de Cuba en apoyo al proyecto de resolución "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba"

Señora Presidenta:

Señores Delegados:

Por decimoquinta ocasión consecutiva, Cuba presenta ante la Asamblea General el proyecto de resolución titulado "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba".

Lo hacemos en defensa de los derechos del pueblo cubano, pero también en defensa de los derechos del pueblo norteamericano y de los derechos de los pueblos que ustedes representan en esta Asamblea.

La guerra económica desatada por Estados Unidos contra Cuba, la más prolongada y cruel que se haya conocido, califica como un acto de genocidio y constituye una violación flagrante del Derecho Internacional y de la Carta de Naciones Unidas. En estos 48 años, el bloqueo norteamericano ha provocado a Cuba daños económicos superiores a los 86 000 millones de dólares. Siete de cada diez cubanos han vivido desde su nacimiento sufriendo y resistiendo los efectos del bloqueo, que trata de rendirnos por hambre y enfermedades.

El bloqueo impide a Cuba comerciar con Estados Unidos y recibir turismo desde este país. Prohíbe a Cuba utilizar el dólar en sus transacciones externas y recibir créditos o realizar operaciones con bancos norteamericanos o sus filiales en otros países.

El bloqueo no permite al Banco Mundial o al Banco Interamericano de Desarrollo otorgarle siquiera un modesto crédito a Cuba.

Pero más grave que todo eso es que el bloqueo de Estados Unidos impone sus criminales disposiciones a las relaciones de Cuba con los demás países que integran esta Asamblea General.

Hemos visto, señores delegados, cómo el representante del Gobierno de Estados Unidos ha vuelto a repetir aquí los mismos argumentos falaces y las mismas mentiras que en años anteriores han dicho a esta Asamblea.

Miente cuando dice que el embargo es un tema bilateral.

Miente cuando dice que Cuba puede comerciar y comprar en otros países lo que le está negado comprar en Estados Unidos.

Miente cuando dice que Estados Unidos no persigue a los barcos de otros países que intentan llegar a Cuba.

Dice, además, a esta Asamblea que Cuba utiliza el bloqueo como un pretexto.

Repito al distinguido delegado lo que ya dije el pasado año: Si el Gobierno de Estados Unidos considera que Cuba usa el tema como un pretexto, ¿por qué no nos quita el pretexto levantando el bloqueo? ¿Por qué no elimina el bloqueo contra Cuba, si, según su opinión, Cuba lo usa como un pretexto para justificar su supuesto fracaso?

El bloqueo prohíbe el comercio con Cuba a empresas situadas en sus países, señores delegados, no solo a empresas norteamericanas sino a empresas de los países que ustedes representan en esta Asamblea y que son subsidiarias de compañías norteamericanas. Tampoco pueden entrar a puertos norteamericanos los barcos con bandera de sus países, señores delegados, si antes transportaron mercancías desde o hacia Cuba. Es la Ley Torricelli, firmada por el presidente Bush padre en 1992.

El bloqueo norteamericano prohíbe también a las empresas del resto del mundo, las de sus países, señores delegados, exportar a Estados Unidos productos que contengan materias primas cubanas e impide a esas empresas exportar a Cuba productos o equipos que contengan más de 10% de componentes norteamericanos. Esa es la verdad.

El bloqueo, señores delegados, persigue a los empresarios de otros países, no solo a los norteamericanos, sino a los de otros países, compatriotas de ustedes, que intenten realizar inversiones en Cuba. Se les amenaza con prohibirles la entrada a Estados Unidos a ellos y a sus familias e, incluso, con llevarlos a juicio en cortes norteamericanas. Es la Ley Helms-Burton, de 1996.

No voy a insistir en ejemplos que prueban cuanto he dicho. El Señor Secretario General ha difundido un amplio informe, con las contribuciones de 96 países y 20 organismos y organizaciones internacionales, en el que se demuestran inequívocamente los sufrimientos y carencias que el bloqueo impone a la vida y el desarrollo del pueblo cubano.

Sí nos parece, señores delegados, importante informar a la Asamblea General sobre el plan para la reconquista de Cuba aprobado por el presidente Bush en mayo del 2004 y actualizado en julio del 2006. En él se reconoce claramente lo que el gobierno norteamericano haría en nuestro país, si logra en algún momento ponerlo bajo su control.

Según el Presidente de Estados Unidos, lo más importante sería devolver todas sus propiedades en Cuba a los antiguos dueños. Ello incluiría, por ejemplo, arrebatar las tierras a los cientos de miles de campesinos que hoy son en Cuba dueños de sus tierras individualmente o mediante cooperativas, para restablecer en ellas el latifundio. Implicaría también expulsar de sus viviendas a millones de propietarios cubanos, para devolver los inmuebles o los terrenos a sus antiguos reclamantes.

El presidente Bush lo describió como un proceso acelerado y bajo el control total del gobierno de Estados Unidos, que para eso crearía una llamada Comisión para la Restitución de los Derechos de Propiedad.

También se crearía otra estructura, el Comité Permanente del Gobierno de Estados Unidos para la Reconstrucción Económica de Cuba, que dirigiría el proceso de imponer en Cuba un durísimo programa de ajuste neoliberal, que incluiría la privatización salvaje de los servicios de educación y salud, y la eliminación de la seguridad y la asistencia social. Se suprimirían retiros y pensiones y se les ofrecería a los jubilados trabajar en labores de construcción, en un denominado Cuerpo de Jubilados Cubanos.

El presidente Bush reconoce que "no será fácil" aplicar en Cuba este plan. Por eso, encarga al Departamento de Estado crear "como prioridad inmediata" un aparato represivo, que imaginamos será entrenado en las brutales técnicas de asfixia que el Vicepresidente Cheney no considera torturas, para sofocar la interminable resistencia del pueblo cubano. Se reconoce, incluso, que "será larga" la lista de cubanos que serían perseguidos, torturados y masacrados.

Se piensa, incluso, en un Servicio Central de Adopción de Niños, para entregar a familias en Estados Unidos y en otros países a los niños cuyos padres caerán combatiendo o víctimas de la represión.

Todo este cínico y brutal programa de recolonización de un país, después de destruirlo e invadirlo, sería dirigido por un personaje que ya está nombrado y cuyo ridículo cargo, que recuerda a Paul Bremer, es el de "Coordinador para la Transición en Cuba". Un tal Caleb McCarry es el señor, cuyo único antecedente notable es su estrecha amistad con los grupos terroristas de origen cubano que todavía hoy planean y ejecutan desde Miami, con total impunidad, nuevos planes de asesinato y sabotaje contra Cuba. Son los mismos grupos que piden al Presidente Bush que ponga en libertad al terrorista Luis Posada Carriles, autor de la explosión de un avión civil cubano, mientras se somete a cruel y prolongado encarcelamiento en Estados Unidos, desde 1998, a Cinco valerosos luchadores antiterroristas cubanos.

Dos años después de su proclamación, señores delegados, gran parte del plan fue ya ejecutado.

Así, se impusieron nuevas y mayores restricciones a las visitas familiares a Cuba de los cubanos residentes en Estados Unidos.

Se persiguió con saña a los norteamericanos que viajaron a Cuba. En los últimos dos años han sido multadas más de 800 personas acusadas de viajar a nuestro país.

Se impusieron restricciones adicionales al envío de remesas a Cuba.

Prácticamente se eliminaron los intercambios académicos, culturales, científicos y deportivos.

Desde el 2004, han sido sancionadas 85 compañías por supuestas violaciones del bloqueo contra Cuba.

Se ha intensificado la feroz persecución contra las transacciones financieras y el comercio de nuestro país. Son visibles los resultados del demencial rastreo a escala global que el llamado Grupo de Identificación de Activos Cubanos realiza de todo lo que parezca ser un pago desde y hacia Cuba.

Junto al reforzamiento del bloqueo, el Presidente Bush aprobó en mayo del 2004 otros 59 millones de dólares para pagar a sus escasos y alicaídos mercenarios en Cuba con el fin de fabricar una inexistente oposición interna, y para pagar campañas de propaganda y transmisiones ilegales de radio y televisión contra Cuba.

Pero todo fue en vano. El Presidente Bush vio como se le acababa el tiempo y no podía cumplir su promesa a los grupos extremistas cubanos de Florida. Sus problemas domésticos y en el exterior crecían y crecen y Cuba socialista seguía y sigue ahí, enhiesta e inclaudicable.

Entonces, el 10 de julio de 2006, el Presidente Bush agregó nuevas medidas a su plan.

Una significativa particularidad de este nuevo engendro de 93 páginas es que contiene un anexo secreto, con acciones contra Cuba que no se hacen públicas y explican que es "para lograr su efectiva realización" y "por razones de Seguridad Nacional". ¿Serán nuevos planes de asesinato contra dirigentes cubanos, más actos terroristas, una agresión militar? Desde esta tribuna emplazamos hoy, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, al presidente George W. Bush a dar a conocer públicamente el contenido de ese documento, que no ha tenido hasta hoy el valor de revelar.

En el plan se incluye la asignación de, por supuesto, más dinero. Esta vez son 80 millones de dólares en dos años y no menos de 20 millones por año hasta la derrota de la Revolución cubana. Es decir, para siempre.

También se incrementan las transmisiones de radio y televisión contra Cuba, en abierta violación de las normas de la Unión Internacional de Telecomunicaciones.

Por otro lado, se realizan renovados esfuerzos para crear una llamada "coalición

D

Pobres cubanos, encima de soportar la dictadura, tienen que soportar la clausura a la que le someten algunas democracias venidas a menos.

glups

Hay ciertos paises a los que la ONU le suda la po... ¿Que se les condena por algo? No pasa nada.
Ahora es el bloqueo, ni puto caso y no pasa nada. EEUU veta una resolucion de condena a Israel por la matanza de Gaza, no pasa nada.
EEUU e Israel son los paises con mas resoluciones sin cumplir.

x

Que la ONU condena esto? A USA le da igual, que la ONU no aprueba la intervención en Irak? A USA le da igual. Hasta que no se cree un organismo serio y con fuerza para que gestione toda la política internacional, ciertos países seguirán a su rollo y actuando según sus intereses.... Con el nivel de globalización actual, la ONU es como si hicieramos correr un Fórmula-1 en una carretera de montaña sin asfaltar.. un organismo internacional serio ya!!

D

¿Pero porque USA no va a poder hacer un bloqueo contra el que le de la gana? El bloqueo puede ser erroneo pero es una decisión suya, todos los demas pueden comerciar con Cuba. Y otra cosa, ¿Usa no es el demonio personificado, entonces porque Castro quiere comerciar con ellos? En serio, es una cosa que no entiendo...

meneamesta

#10 el problema no es comerciar.. el problema es que EEUU quiere un poco mas..quiere tener influencia..quiere poder..

por que EEUU no le hace lo mismo a Corea del Norte?? ahí los quiero ver..con esos no se jode he..

Eli25bcn

Ya sé que es duro aceptar que uno no sirve para nada...pero si a la tercera no va la vencida no hace falta seguir hasta la décimoquinta...vaya pérdida de tiempo