Las opiniones son como las cabezas: todo el mundo tiene una, pero no todas son igual de buenas. La segunda parte, sin embargo, tiende a ignorarse. Confundimos con frecuencia el derecho a la opinión con el derecho a que nos den la razón. Y aquí es donde hay que empezar a romper el buen rollo. [...] Definitivamente, todas las opiniones no valen lo mismo. Decir que sí es la antítesis del método científico, donde lo que valen son los datos replicables, no el “a mí me parece”. Vía: http://www.twitter.com/alainochoa
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Como el CULO... la frase éra: "Las opiniones son como el culo, todo el mundo tiene el suyo" (Harry el Sucio)