El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, enfureció al sector del cine cuando achacó “sus problemas” a la falta de calidad de las películas y no al recorte de subvenciones y la subida del IVA. Resulta bastante novedoso el hecho de que un ministro se erija en crítico cinematográfico, no tanto las críticas a una parte de la industria cultural patria, a la que un sector no pequeño de la opinión pública suele tachar de acomodaticia, sectaria y, sobre todo, pedigüeña.
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Y una realidad: excepto a los propios interesados... ¿qué nos perdemos el resto por no subvencionar el cine?¿en qué empeora nuestra vida?¿cuales son las obras maestras que nos han mejorado como personas, que nos han ilustrado, que nos han formado o nos han culturizado?
El cine es un evidente bien de lujo. No es un bien de primera necesidad, y su aportación a la cultura es, digámoslo así, bastante discutible. ASí que en una situación de absoluta ruina y endeudamiento me parece fantástico que tribute al mismo tipo que el resto de bienes y que se corte la subvención a las empresas como en el resto de sectores. Coño ya con tanta tontería,
He leído la entrevista esta misma mañana y por lo poco que conozco del mundillo, hay muchas inexactitudes. No quiero pensar mal, pero me da la impresión de que la mayoría de ellas son inexactitudes interesadas, como cuando en el punto 1 expone que "Al igual que en España, los canales de televisión alemanes está obligados a destinar una parte de sus beneficios a la creación cinematográfica" pero no precisa ni cual es el porcentaje de unos o de otros ni apunta cual fue el motivo de ese porcentaje, ya que ahí radica uno de los problemas del sistema español...